jueves, 26 de enero de 2012

El cuarto jugador


Cd. Victoria, Tam.- Sin el capital político de los maestros y la plusvalía del segundo oficio que desempeñan en México como es la movilización electoral, sería impensable el Partido Nueva Alianza, PANAL.
La organización no parece permeada por ideología reconocible, al menos dentro de los parámetros tradicionales. No defiende principios: sirve a intereses muy particulares y visibles. Es el partido de las negociaciones permanentes.
Nacido oficialmente en 2002 como Asociación Ciudadana del Magisterio reconocida por el IFE, evolucionará rápidamente a partido en 2005, con MIGUEL ÁNGEL JIMÉNEZ al frente, un joven politólogo del ITAM de trayectoria pública inexistente, salvo su amistad con ELBA ESTHER GORDILLO.
Relación que le significó a JIMENEZ el ser diputado federal y luego director de la Lotería Nacional.
Curiosamente, este precoz líder partidista, surgido casi por generación espontánea (por capricho de la GORDILLO) ya no pertenece hoy al PANAL, ni siquiera vive en México.
Tras ser acusado de utilizar recursos de la Lotería para financiar campañas políticas, el hombre defeccionó de todo para aceptar un cargo diplomático en el Reino Unido.
La presidencia de dicho partido pasaría sucesivamente a manos del abogado veracruzano TOMÁS RUIZ (2007), el ex-boxeador y empresario capitalino JORGE KAHWAGI (2007) y un señor muy interesante de nombre LUIS CASTRO OBREGÓN (2011 en adelante), ex-secretario particular de la señora GORDILLO cuya hoja de servicios incluye haber trabajado en el CISEN.
El PANAL parece haber sido creado ex-profeso como herramienta de transacción electoral de la maestra GORDILLO.
Recuérdese que en la elección del 2000, el apoyo de ELBA ESTHER a VICENTE FOX se ordenó todavía desde el SNTE.
Para el 2006 ya existía el PANAL, cuando la misma dama decide apostarle a dos proyectos paralelos (algo típico de ella), postulando a ROBERTO CAMPA CIFRIÁN como candidato de Nueva Alianza y apoyando al panista FELIPE CALDERÓN.
Desde el PANAL también, ELBA ESTHER negociaría en 2011 su pasajera alianza con el priísmo de ENRIQUE PEÑA NIETO, relación abruptamente finiquitada la semana anterior.
El propio LUIS CASTRO dio mucho de que hablar por estos días cuando se animó a delinear el perfil idóneo de su aspirante presidencial, ojo.
De preferencia dijo que podría ser una mujer con trayectoria política respetable y experiencia en el mando, lo cuál motivó que los medios dirigieran sus reflectores hacia la ex-jefa del gobierno capitalino (y alguna vez dirigente nacional del PRD) ROSARIO ROBLES BERLANGA.
Hasta la tarde del miércoles en que escribo estas líneas, la misma ROSARIO había negado tener aspiraciones.
Primeramente declaró a un portal electrónico en forma tajante: “No ha habido ninguna propuesta, pero ni aunque la hubiera aceptaría, para acabar pronto. No soy la candidata de nadie.” (Animal Político, enero 24).
Posición que después ratificaría en charla con el periodista JOSE CÁRDENAS, de Radio Fórmula: “Creo que hay que ser justos y decir las cosas como son, ellos no me han buscado, pero la segunda es que aunque me buscaran, yo no aceptaría.”
Lo cierto es que este minipartido se encuentra en vías de añadir un cuarto jugador a la puja presidencial, hoy cuando ya nos habíamos hecho a la idea de tres opciones: PRI, PAN y el frente de las izquierdas.
Viene alguien más, en efecto, a todas luces un candidato (a) ciudadano (a), es decir, una figura externa pues el PANAL no abunda en personalidades relevantes capaces de dar la pelea.


Zigzag
*** ACLARACIÓN necesaria. *** RATIFICO plenamente mi escrito de ayer donde afirmé que el PRI ha tenido 20 dirigentes nacionales, el PRD 17 y el PAN 9 desde que se fundó el Partido Verde, aunque el año de referencia no es 1991 (su registro formal) sino 1986 (su nacimiento). *** EN 26 AÑOS, pues, los verdes solamente han tenido dos cabezas: padre e hijo. *** HUERTO familiar, en efecto, quien lo duda. *** ES OBVIO el contraste con los demás partidos. ***