lunes, 30 de abril de 2018

Lapsus y colapsos


Cd. Victoria, Tam. – El mal ejemplo contagia más pronto que el ejercicio de la virtud. Las pifias dejan precedente, son algo parecido a virus mentales que observan un comportamiento autorreplicante.
En este sentido, el llamado “síndrome tamaulipeco” parece haber infectado a PEPE TOÑO MEADE, en su corta historia como hijo adoptivo del priísmo y (en calidad de ello) candidato presidencial.
En dicho empeño, sin duda tiene en quiénes inspirarse. Mire usted, figuras de la talla de BALTAZAR HINOJOSA y OSCAR ALMARAZ, por citar dos ejemplos preclaros de la política nativa.
El primero excandidato fallido a la gubernatura y actual titular de SAGARPA. El segundo alcalde cuerudo, hoy día en precampaña reeleccionista.
De HINOJOSA se recuerda aquel “Yo mero” que lanzó de su ronco pecho un 24 de mayo de 2016 en Tampico, cuando su campaña por Tamaulipas estaba en camino al despeñadero.
Fue entonces cuando decidió romper con sus antecesores (también priístas) en un discurso donde nos avisó (notificó, informó) sobre detalles demasiado obvios, que le pareció importarte recordarnos.
Cuando dijo aquello de: “no soy TOMÁS, no soy EUGENIO, no soy EGIDIO, ni jamás seré CABEZA DE VACA.”
Asunto de identidad que, por supuesto ya conocíamos. No era necesario mostrar acta de nacimiento ni fe de bautizo para que supiéramos a qué nombre responde el señor.
Pero HINOJOSA hubo de rematar con una frase grabada para la historia, inspirado tal vez en la canción de CHAVA FLORES donde reza al canto: “yo soy quien soy y no me parezco a naiden.”
De tal certeza habría derivado el “no se equivoquen, el candidato de esta contienda soy yo, yo mero” de BALTAZAR.
Autodefinición que dejaría tal impronta (huella, rastro, marca) en el subconsciente colectivo que luego sería incorporada a la batería doctrinal de TOÑO MEADE, vía #Twitter.
La réplica imitativa tardó, pero llegó, en letra del presidenciable, cuando MEADE, el pasado 8 de febrero, intercambió algunos fuegos de artificio con la obradorista TATIANA CLOUTHIER.
El incidente, de sobra conocido, se suscita a partir de que el susodicho anota en la red del pajarito que “México necesita un presidente serio. Un profesional que sepa enfrentar los retos internos y externos.”
A lo que TATIANA, con toda la mala leche del mundo, le preguntaría, en la misma red: “¿A quién propone?”, revirando MEADE con sabiduría baltazarista: “¡Yo mero!”
Hay una parte de la historia que poco se conoce y fue contada por el periódico EL FINANCIERO unas semanas después, el primero de marzo.
Resulta que PEPE TOÑO quedó tan contento con su desplante, que registró ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) el derecho exclusivo a utilizar la marca “yo mero” en tareas propagandísticas y publicitarias, durante los próximos 10 años.
Y no es broma, mire usted, como lo pudo atestiguar el portal VERIFICADO 2018, encargado de combatir noticias falsas (fake news) y constatar la veracidad de la información difundida en torno a la contienda presidencial.
En efecto, según el expediente del IMPI clave 2010475, las frases "Yo Mero", "JOSÉ ANTONIO MEADE" y "MEADE 2018" son ya de su propiedad, a partir del 16 de febrero pasado, lo cual le significó un costo de 12 mil 288 pesos. Trámite que realizó con la asistencia del bufete ÁLVAREZ TOSTADO & DÍEZ MARINA S.C.
Pero resulta que la aportación tamaulipeca a la campaña de MEADE no parece haber concluido con dicho caso.
El lector recordará que el pasado 11 de septiembre de 2017, durante su primer informe de labores, el alcalde de Victoria OSCAR ALMARAZ lanzó de su ronco pecho otro esplendoroso #hashtag, para regocijo de la comunidad tuitera regional.
Junto a colaboradores y seguidores, ante la mirada expectante de los medios, ALMARAZ narraba felizmente las hazañas de su administración, el programa permanente de bacheo y alumbrado público, así como el recuento de 15 mil lámparas para el alumbrado público.
Fue en este último rubro donde buscaría alcanzar la cumbre del lirismo, con una frase acaso poética o (incluso) cercana al pronunciamiento metafísico, al decir: “¡Que se vaya la luz y que regrese la oscuridad!”
Desde luego, el guión señalaba lo contrario, pero un lapsus de último momento invirtió palabras y significados.
Lo cuál haría trabajar horas extras a columnistas con vocación psicoanalítica que acariciaron la idea de una probable proyección de su inconsciente más oscuro.
Otros colegas, expertos en artes ocultas, especularon con la posibilidad de una invocación a las fuerzas macabras que hicieron factible su triunfo electoral.
El caso es que ALMARAZ, ni tardo ni perezoso (no bien notó las risotadas del público) repitió tranquilamente la línea del discurso, corrigiendo el entuerto.
Y hasta se dio el lujo de justificarse con la broma de que habría dicho tal cosa “nomás para ver si estaban atentos.”
Aunque estas mañas se pegan y aquí estriba la preocupación compartida por tirios y troyanos, mire usted, pues la principal víctima sigue siendo el doctor MEADE.
El 28 de enero pasado, en un encuentro con miembros y dirigentes del PANAL en Hidalgo, les dijo que México avanzará en desarrollo cuando “se hayan resolvido” (sic) sus derechos fundamentales.
Más tarde, tratando de enmendar tan penoso traspiés, el hombre publicaría una foto suya en redes sociales haciendo planas (como alumno de primaria) donde repite, línea tras línea, que se dice resuelto y no resolvido.
Apenas 20 días antes (el 8 de enero) sus adversarios le habían trucado un video de su gira por Zacatecas, el 2 de enero, poniendo en boca suya la frase de que "la calle es para el delincuente y la cárcel para el ciudadano."
Aunque luego los medios tuvieron oportunidad de comprobar que había sido, en efecto, una falsificación. Nunca dijo eso, se lo editaron sus enemigos con aviesas intenciones.
Pero bueno, como al mal fario parece perseguir a este hombre, el pasado jueves 26 de abril, durante su gira por Reynosa, Tamaulipas, de nueva cuenta fue piedra de escándalo.
Solo que esta vez sí resultó cierto. Emocionado al micrófono, ante 5 mil simpatizantes que atestaron el lienzo charro local, MEADE habló del cambio para luego afirmar que le gustaría (así dijo) “que las cosas buenas bajaran, y las cosas malas subieran”.
Lo más curioso es que luego añadió: "las cosas están al revés en Tamaulipas y las vamos a enderezar.”
En efecto, están al revés, sobre todo cuando las suscriben los señores HINOJOSA, ALMARAZ y MEADE.
¿Urge enderezarlas?, definitivamente. Por principio, en su expresión formal, vocabulario, lenguaje.
Y, por supuesto, en todo lo que haya de trasfondo, psicoanalítico o brujeril.


jueves, 26 de abril de 2018

La prepa de la loma


Cd. Victoria, Tam. – La seguridad escolar es un tema muy delicado que está hoy en boca de todos, tras el ataque de un grupúsculo armado contra la Preparatoria Federalizada número 1, de esta capital, la que lleva por nombre “Ing. Marte R. Gómez”.
No es cualquier escuela, es una reconocida institución de educación media superior, ubicada sobre la avenida Justo Sierra, a un costado del estadio universitario “Eugenio Alvizo Porras”, frente al Centro de Salud y el hospital del IMSS, junto al campus más antiguo de la UAT, el “Adolfo López Mateos”.
Sobre la misma avenida hay otras dos prepas cercanas, la Federalizada número 2 (“Aniceto Villanueva”) y, por la bajada hacia el vado, la “Jaime Torres Bodet.”
Es una zona de intenso movimiento, un ir y venir incesante de profesores, estudiantes, médicos, enfermeras, laboratoristas, intendentes, personal ejecutivo y administrativo de todas las dependencias asentadas en las inmediaciones.
Amén del comercio ambulante que, ya de por sí, es bastante; taxis, peseras y la ya legendaria ruta de camiones azules, cuya supervivencia es un desafío al paso del tiempo, en dicha traza urbana, apretada y sobrepoblada.
A la vuelta se ubican cuatro unidades académicas, Derecho, Comercio, Trabajo Social y Ciencias, el gimnasio universitario, los centros de Lenguas, Excelencia y Gestión del Conocimiento.
Recordar el entorno subraya la relevancia de la noticia. Que todas las instituciones ahí asentadas no sean motivo suficiente para que la autoridad respectiva opere una estrategia exitosa de seguridad conjunta.
Este martes, poco antes de las seis y media de la tarde, una persecución entre jóvenes culminó en la Prepa Federalizada 1, más allá de la reja de entrada, dejando por saldo cinco heridos de bala, incluyendo dos alumnas. Se habla de nueve disparos.
Las versiones varían, hay información pendiente de precisar. Saber, por ejemplo, si los agresores perpetraron su ataque adentro de las instalaciones o dispararon desde la línea divisoria, la entrada.
Si hubo antes un intento de “levantón” (rapto, secuestro) que, al verse frustrado, devino en corretiza y, finalmente, agresión con arma de fuego por la espalda, versión atribuida al director del plantel VICENTE HUERTA.
Según dicho testimonio, la víctima habría escapado tras el intento de subirlo por la fuerza a un vehículo, intentando resguardarse en las aulas.
Habría recibido los primeros tres tiros fuera de la escuela. Los demás se accionaron de la reja hacia adentro, multiplicando el daño.
La gente también se pregunta si el blanco del ataque era un joven concreto y los otros cuatro resultaron víctimas ocasionales o había intención de afectar a todos.
Si es verdad que murieron dos, como insistían versiones cercanas a los hechos, o bien (como reza el parte oficial) solamente hubo heridos, cuatro de los cuales serían dados de alta al día siguiente (miércoles).
También es de cinco el número de detenidos por la policía, señalados tres como responsables y dos más en calidad de cómplices.
De comprobarse que (efectivamente) son los agresores, ello hablaría de una eficaz capacidad de respuesta por parte de la corporación. Al menos en ese punto de la ciudad.
Algo tendrá que hacerse en la esfera municipal de seguridad pública para imponer una mayor presencia en dicho espacio citadino, importante y concurrido, donde además las diversas dependencias tienen equipo de seguridad propio.
No es poca cosa el que alguien dispare hacia adentro de un centro escolar, en horas de trabajo. Igual podrían haber resultado heridos los maestros.
En los últimos años, los presupuestos de seguridad escolar se han incrementado a todos los niveles. Y también los prestadores privados de este servicio.
La fecha de referencia que detonó estos esfuerzos es el año 2010. Año cuarto de FELIPE CALDERÓN y sexto de EUGENIO HERNÁNDEZ, umbral de rupturas graves entre grupos delictivos que convirtieron las ciudades en campos de batalla.
De entonces a la fecha, las tareas de vigilancia en instituciones educativas han instrumentado medidas nunca antes vistas, no solo en Tamaulipas, en toda la república.
Bardas y cercas perimetrales cada vez más altas y fortificadas, cámaras de vigilancia, personal uniformado, casetas a la entrada, monitoreo electrónico adentro y afuera.
Sin distingos así se está trabajando en la enseñanza pública y privada, de guardería y preescolar a primaria, secundaria, preparatoria y universidad.
Rutinas y protocolos acordes con el tiempo difícil que nos ha tocado vivir. De aquí la extrañeza por los sucesos de esta semana en la prepa de la loma.
¿Cómo fue que se llegó a esto?, se preguntan los padres de familia cuya respuesta puntual fue no enviar a sus hijos al siguiente día del episodio sangriento. El ausentismo estudiantil como respuesta muda, pero significativa. Desconfianza clara hacia las instituciones.
Lo cual señala también la necesidad de ubicar en qué punto estuvo la falla y en que etapas del proceso será necesario deslindar responsabilidades. Apretar tuercas, incluyendo, por supuesto, a la corporación policiaca municipal que, en casos así, suele ser la última en enterarse.
Alguien deberá decirle al alcalde que hay asuntos más importantes que el bailongo, el carnaval, los disfraces, el jolgorio y los conciertos de música grupera. Es tema, sin duda, para las campañas.


miércoles, 25 de abril de 2018

Polemizar más, con menos


Cd. Victoria, Tam. – En mayor o menor medida, el modelo interactivo tiene medio siglo instrumentándose en los debates presidenciales de Europa y Estados Unidos.
Si antes no se aplicó en México ello obedeció a (1) la ausencia de voluntad oficial, (2) la desconfianza mutua entre las diferentes fuerzas políticas y también (3) el miedo a un esquema de trabajo que otorga amplias facultades de arbitraje a los moderadores.
Un verdadero desafío a la imparcialidad y el buen criterio que (al menos en este primer round) salvaron con éxito DENISE MAERKER, AZUCENA URESTI y SERGIO SARMIENTO.
No cargaron los dados y esto ya representa un mérito. Lo esperó y vio mucha gente, que además se sostuvo sin apagar el televisor ni cambiar de canal, hasta el final. Esto también es un avance.
Cuestión de recordar la experiencia de 2016 en Tamaulipas, aquel formato extremadamente rígido y soporífero del IETAM.
Desde esta columna hubo monitoreo cercano al proceso previo y los efectos posteriores a los dos programas del sábado 23 de abril y el miércoles 4 de mayo.
Y también una expresión franca de disgusto por la escasa o nula flexibilidad de aquel modelo, que solo en algunos momentos alcanzó la categoría de discusión.
Muy apenas merecería el nombre de disertación sucesiva entre los señores FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA (PAN), BALTAZAR HINOJOSA (PRI), GUSTAVO CÁRDENAS (MC), JORGE VALDEZ (PRD), ARMANDO VERA (PT), HÉCTOR GARZA (MORENA), ABDÍES PINEDA (PES) y PANCHO CHAVIRA (independiente).
Al final del segundo, me permití escribir:
“Estamos muy lejos todavía de verdaderos debates. Quienes los hemos visto y disfrutado en otras partes, echamos de menos el duelo de inteligencias, el tejido fino, el reto ideológico, la esgrima verbal.”
En efecto, si revisamos nuestras observaciones de entonces, a la luz de la experiencia reciente en la capital mexicana, hay un mundo de diferencia en términos de calidad, atractivo y eficacia.
Sigo pensando (antes y hoy) que solo el primer debate debiera dar cabida a todos los candidatos. El siguiente (siguientes) exigiría (exigirían) un criterio más selectivo y centrado en los punteros.
Ejemplo interesantísimo, la tercia de programas llevados a cabo entre los aspirantes a la presidencia de Francia, en la primavera de 2017.
Con aquella sofisticación propia del pensamiento galo, una primera transmisión reunió el 20 de marzo a los cinco candidatos principales, de acuerdo a las encuestas. Fue vista por 10 millones de personas.
La segunda tuvo lugar el 4 de abril, con un criterio menos estricto. Cupieron los once aspirantes registrados y (acaso por ello) la audiencia bajó a 6.3 millones de espectadores.
Y como en aquel país la ley obliga a una segunda vuelta, en caso de que ningún candidato logre mayoría, para la segunda votación hubo necesidad de un tercer debate, el tres de mayo.
Pleitazo histórico entre los dos finalistas, el centro-liberal EMMANUEL MACRON y la ultraderechista MARINE LE PEN.
No hubo estrados, solo una larga mesa cuyas proporciones coincidían cabalmente con la anchura de los televisores wide-screen.
Y, desde luego, dos moderadores que por momentos hubieron de cumplir funciones de réferis, ante la rispidez de la polémica, donde la argumentación más agresiva no estaba, precisamente, en el señor MACRON (cherchez la femme).
Fue un “tete-a-tete” que reportó un rating asombroso de 16 millones de televidentes. La suma (casi) de los dos anteriores.
Y aunque todo el mundo reaccionó con sorpresa ante la combatividad mostrada, quedaron pocas dudas respecto a la manera de pensar de cada contendiente y, rubro por rubro, de su respectivo proyecto nacional.
Las comparaciones son inevitables. Si recordamos el encuentro tamaulipeco de 2016, habría sido bastante más satisfactorio de haberse centrado en los señores CABEZA DE VACA, HINOJOSA y (si acaso) CÁRDENAS.
Sobre todo, cuando recordamos la aportación tan pobre de participantes poco menos que simbólicos, como CHAVIRA, PINEDA, VALDEZ, VERA y GARZA. Sin duda, prescindibles.
De manera similar, hoy me parece que el encuentro presidencial ganaría en claridad, contundencia y (por supuesto) aprendizaje, reduciéndolo a tres: ANDRÉS MANUEL, RICARDO y PEPE TOÑO. En un espacio donde, por cierto, sobran los estrados.
En cuanto a valoraciones, con diferencias de grado, los análisis coinciden. La artillería anti-AMLO desplegada antes, durante y después del programa no logró modificar las preferencias de su multitudinario voto duro.
Aunque (opinión personal) sí impactó con fuerza en el sector de los indecisos, donde RICARDO ANAYA parece repuntar, empezando por recuperar los puntos perdidos durante la guerra sucia del mes pasado, orquestada desde la PGR.
Paradójicamente, LÓPEZ OBRADOR adoptó una estrategia que habría aplaudido CARLOS SALINAS (“ni los veo, ni los oigo”) ante el fuego cruzado de sus detractores.
Estaría por verse si dicho fenómeno debe calificarse como una conspiración, acuerdo oscuro entre los cuartos de guerra o maniobra orquestada, como el tabasqueño pretende, explica, insiste.
En cualquier país (y hasta en la competencia económica) el puntero es el blanco natural de quienes se disputan un mercado. Centrarse en el líder.
No necesitan ponerse de acuerdo para ello. Está en el ABC del marketing y aplica, por igual, en cualquier competencia electoral y comercial.
Salvo que las encuestas indiquen otra cosa, el orden de los candidatos se mantiene. Primero AMLO, segundo RICARDO, tercero MEADE. Hizo poco este último para merecer algo mejor.
Cabría, por cierto, esperar un acortamiento (relativo) en la distancia que separa a LÓPEZ OBRADOR de ANAYA, con JOSÉ ANTONIO rezagado irremisiblemente.
La limitada actuación de MARGARITA hace pensar que se encuentra (en términos estadísticos) muy cercana a su techo de votos. Su nivel de incompetencia, de acuerdo al célebre “Principio de PETER”.
Y, bueno, quien estaba llamado a una puntuación interesante, acaso próxima (o hasta superior) a la señora ZAVALA, era JAIME RODRÍGUEZ, el “Bronco”.
Aunque con la actuación tan lamentable de este domingo, la propuesta absurda de cortarle las manos a los ladrones, sus despropósitos, groserías y bufonadas, hoy se ubica como el “patito feo” de la contienda.
De poco le sirve el ser un éxito como #hashtag en redes, tema favorito de memes y chistes televisivos. Ello no le quita el sello de impresentable. El apestado, de aquí a julio.
Habrá que esperar números y, desde luego, los dos encuentros televisivos que faltan, el 20 de mayo en Tijuana y el 12 de junio en Mérida. De punta a punta.



lunes, 23 de abril de 2018

Así fue el debate


Cd. Victoria, Tam. – Evento novedoso y en muchos sentidos diferente. El debate presidencial de este domingo se caracterizó desde la víspera por la intensa expectativa que levantó entre el sector más amplio de la audiencia.
Ese público mayoritario que tradicionalmente se muestra más interesado en el showbiz y los deportes que en la política.
De pronto los mexicanos descubren que una discusión entre candidatos puede ser entretenida como la premiación de los Óscares y tan reñida como la final futbolera o la serie mundial de beisbol.
El ánimo, en efecto, fue de competencia. Aire fresco al país, dicen los comentaristas en sus acotaciones previas.
Influye en esto el nuevo formato interactivo que otorga a los moderadores el rango de entrevistadores. Las amplias posibilidades de réplica y contrarréplica entre los contendientes.
Aunque también la perspectiva inédita de una elección monstruo donde se conjunta el mayor número de procesos paralelos.
La sensación de que el abstencionismo será derrotado. Esa participación amplia de gente que usualmente no vota. Lo cual suele acarrear noticias adversas a los partidos en el poder, en federación y estados.
Y también la tensión previa en torno a un candidato puntero como ANDRÉS MANUEL, contra el cuál se volcaron, de manera comprensible, las estrategias de los otros cuatro: RICARDO, JOSÉ ANTONIO, MARGARITA y JAIME.
Pese a la lluvia, un ambiente de alfombra roja marcó la llegada de los candidatos al dieciochesco Palacio de Minería.
Pasarela entre cordones de seguridad desde los cuáles emergen aplausos de simpatizantes y flashes de la prensa otorgando a los candidatos el rango de celebridades.
Noche de campeonato donde la polémica entre partidarios le da cuerpo al rating. Todo apunta a la novedad, la expectación, curiosidad renovada por la disputa del poder que antaño la desconfianza había ahogado.
Primero de tres debates, el tema general (Política y Gobierno) se desglosó en tres subtemas, llamados “bloques”, a saber: (1) Seguridad pública y violencia, (2) Combate a la corrupción y la impunidad y (3) Democracia, pluralismo y grupos vulnerables.
Tres conductores (DENISE MAERKER, AZUCENA URESTI, SERGIO SARMIENTO) que, justo es decirlo, hicieron su trabajo, supieron inquirir al estilo americano, cuando sentían que algún aspirante tendría que explicar mejor sus afirmaciones.
Formato originalmente programado para una hora con 52 minutos y que finalmente quedó en 2 horas con 5 minutos.
Cinco candidatos, cinco historias y perfiles diferentes, aún pendientes de valorar, cuando concluyan los dos siguientes encuentros televisivos, en Tijuana (20 de mayo) y Mérida (12 de junio).
Por principio, se cumplió a cabalidad la expectativa de que AMLO centralizaría los cuestionamientos de sus contendientes, situación prevista, entre otros, por él mismo (“me van a echar montón”).
Los respectivos cuartos de guerra de sus adversarios sabían, por principio, que hay un voto duro en la base popular que ha sido inmunizado por años de ataques y desarrollado una coraza muy fuerte contra los señalamientos de sus críticos.
Por ello le apostaron, desde los días previos, a la meta de desequilibrar a LÓPEZ OBRADOR, llevarlo a cometer errores, desquiciarlo con el bombardeo intensivo, para hacer emerger su parte más oscura.
Ahí donde los propios errores pueden modificar la intención del voto. En este sentido, la impresión es que fracasaron.
El candidato de MORENA llegó armado de una dosis muy bien pulida, entrenada, de paciencia, que los caricaturistas ilustraban con algo equivalente a tapones en los oídos (¿algún calmante?).
Rostro calmo, impávido, control emocional al punto, jamás gritó, ni sobrerreaccionó, ni insultó, ni emergió aquella costumbrita de poner apodos o confrontar a su interlocutor en turno.
Pero esa calma tiene sus desventajas. A la hora de las críticas punzantes, en particular cuando estas llovieron con la dosis suficiente de datos duros, concretos, verificables, AMLO mostró el lado indeseable de su mansedumbre.
La indolencia. Una y otra vez se desentendía de los problemas. No respondía de forma sustantiva, o bien despreciaba la oportunidad al micrófono, ignorando a sus interlocutores.
Y mire usted que ellos insistían. El priísta MEADE con los departamentos que ANDRÉS MANUEL no habría declarado en su “tres de tres”.
ANAYA en tono machacón, volviendo con esa oferta de amnistía que no podría ser malinterpretación de la prensa, puesto que está grabada en videos.
Y el BRONCO exigiéndole renunciar (cómo los independientes) al subsidio público de sus campañas. Mal que bien ANDRÉS MANUEL aludía, más que contestar.
Tuvieron que pasar varias rondas antes de que le dijera a MEADE que si le comprobaba la propiedad de esos departamentos se los regalaba. O cuando dijo que había entregado 70 de 104 millones a los damnificados de los sismos.
Difícil saber quien tiene razón en la guerra de cifras. Las gráficas de AMLO donde sustenta la idea de que su gobierno en la capital del país disminuyó la incidencia delictiva se contraponían diametralmente con las que mostraba ANAYA, diciendo lo contrario.
No hay ni puede haber respuesta sustantiva a lo que significa la “amnistía” a los líderes delictivos, por la sencilla razón de que está supeditada a una consulta con especialistas que tendría lugar después de la elección, en caso de triunfo.
Tampoco coinciden sus posturas en cuanto a la autonomía del nuevo fiscal. Dicen ANAYA y MEADE que AMLO cree en el nombramiento directo. El candidato de MORENA se defiende alegando que su propuesta pasa por Congreso.
Ya conocíamos la agilidad mental de ANAYA y, sobre todo, su notable destreza para refugiarse bajo un semblante feliz, aunque sus entrevistadoras (el propio MEADE, MARGARITA no se diga) le saquen los trapitos al sol.
Por ejemplo, la forma autocrática como obtuvo su candidatura o el contraste entre su tren de vida y los ingresos declarados fiscalmente. Jamás lo movieron de su carátula sonriente.
PEPE TOÑO MEADE muestra, por igual, un gran control de sus emociones, aunque peca de ortodoxo, en forma y fondo de su discurso. Carece de la frescura, la originalidad chispeante de ANAYA.
Si este primer debate sirviera (suponiendo sin conceder) para que los adversarios de AMLO elijan al mejor oponente que merezca concentrar todos los recursos, esfuerzos y apoyos, sin duda ANAYA supera de calle a MEADE, MARGARITA y JAIME.
El también llamado “BRONCO” confirma de qué materia está hecho. Del autoritarismo más rancio y elemental. Su visión es arcaica y sumamente reaccionaria.
Parece hablar desde posturas de extrema derecha cuando se pronuncia por suspender programas sociales, porque los considera inservibles y dice que solo fomentan la holganza entre los beneficiados.
Y, peor todavía, la propuesta bárbara de “cortar las manos a los ladrones” que provocó expresiones ahogadas entre moderadores y contrincantes.
La propia AZUCENA hubo de repreguntar si la expresión debía entenderse de manera literal. Es decir, la amputación a quien cometa los referidos delitos patrimoniales, lo cuál JAIME confirmó con una seguridad digna de algún clérigo musulmán.
Difícil saber quien ganó el debate o si en casos así resulta viable hacer dicha pregunta. Ganadores, perdedores, puede ser muy relativo.
Se diría que AMLO logró defenderse mejor de lo esperado, pero cayó en las inconsistencias ya conocidas, cuyo origen está en el hábito de proponer ocurrencias que luego le resultan difíciles de sustentar.
MARGARITA es una dama educada, sensible, pero con una visión del mundo muy marcada por su vocabulario asistencial. Sigue hablando como primera dama, familia, hijos, valores.
A muchas mujeres debió agradar ese estilo sincero, bien intencionado, de una esposa y madre de familia que habla desde el corazón sobre aquellos asuntos que preocupan a las buenas personas de México.
Pero eso no basta para gobernar un país dominado por el hartazgo, donde la inconformidad está en llamas, nación hambrienta de posturas antisistema y de talante ríspido, como las que emplea AMLO en los mítines.
Nadie duda que la señora ZAVALA es una buena persona. Su problema es que se observe demasiado blanda como para convertirse en comandante en jefe de las fuerzas armadas.
En cuanto a MEADE hubo varios aciertos. Decir, por ejemplo, que el problema de la delincuencia organizada no se agota en al narcotráfico, pues involucra delitos graves como asalto, secuestro, extorsión, tráfico de huachicol, y por ello la legalización de jamás resolvería, por sí sola, la inseguridad del país.
Diagnóstico realista que derriba de un golpe la visión de su amigo y seguidor VICENTE FOX quien ha promovido dicha legalización, como presunta panacea contra la violencia. Falso, en efecto.
Interesante (y también de MEADE) su visión de incorporar al Sistema de Administración Tributaria (SAT) como herramienta en la lucha contra la corrupción. Muy necesario.
¿Qué hacer para acabar con la corrupción?...
Responde AMLO: gobernar con el ejemplo, barrer la corrupción de arriba para abajo, acabar con privilegios, reducir sueldos arriba y subir los de abajo. Eso y venderle el avión de PEÑA NIETO a DONALD TRUMP.
Rematando con una frase feliz que parece extraída del cancionero cubano: “si esto es ser populista que me apunten en la lista.”
Memes y fotos post-debate abundan en rostros de LÓPEZ OBRADOR con la mirada baja, entrecejo preocupado, cabeza gacha. Señales del esfuerzo por controlar su ira.
Tampoco responde cuando ANAYA le muestra el libro escrito por el propio AMLO sobre FOBAPROA, donde hay ataques contra expriístas que aprobaron dicho programa de rescate bancario y ahora son candidatos de MORENA.
O críticas severas contra el empresario ALFONSO ROMO, hoy enlace empresarial y asesor económico del mismo candidato tabasqueño.
Las divergencias sobre el nombramiento (hoy empantanado) de una fiscalía federal autónoma dejan mal parados a todos y permiten al BRONCO lucir que en Nuevo León fue nombrado su equivalente estatal, por propuesta ciudadana aprobada por el Congreso.
Lo cuál representa una gran hazaña para un gobernador como JAIME, quien llegó al poder sin bancada legislativa. De cualquier manera, se lo aprobaron.
Igual RICARDO ANAYA logra asestar un buen golpe a MEADE cuando le marca prioridades a la lucha anticorrupción, como son la de esclarecer el caso ODEBRECHT, la estafa maestra, el socavón de Cuernavaca, más los tres gobernadores priístas corruptos, dos de apellido DUARTE y BORGE.
Nadie quiere malquistarse abiertamente con la diversidad sexual. Finalmente se trata de votos que eventualmente podrían hacer falta al final. Por ello todos responden con cautela y con respeto del matrimonio gay.
En su mensaje final, el BRONCO se acerca todavía más al estilo brutal de DONALD TRUMP. El viejo discurso contra la clase política tradicional, su consigna de correr a todos los flojos del gobierno y la afirmación de que los partidos son el cáncer de México.
Plagadas de lugares comunes las despedidas de MARGARITA y MEADE, son superados en este rubro por ANAYA cuando proclama que: “cabemos todos en la casa común, con un piso de bienestar, un techo de legalidad y cuatro paredes de cohesión social.”
Y un LÓPEZ OBRADOR absolutamente predecible. Su tema ya conocido de encarnar la cuarta transformación histórica del país, luego de la independencia, la reforma y la revolución, culminando con un “¡Viva México!”
Cierra el programa y despide AZUCENA. Nada para nadie, creo. El verdadero efecto de los debates lo sentiremos después del tercero. Fue el primer round, apenas.
Ganó, en todo caso (y por lo pronto) la audiencia que sin duda asistió, por vez primera, a un encuentro diferente y (con mucho) más estimulante que las soporíferas transmisiones de 1994, 2000, 2006 y 2012.
El proyecto de interactividad funcionó y esto es una buena noticia.

lunes, 16 de abril de 2018

Indignación necesaria


Cd. Victoria, Tam. – En tiempos de exasperación social, no puede haber discurso cómodo ni en boca de candidatos ni en proclamas de partidos, salvo que se quiera perder.
Con la sensación de hartazgo que hoy en día respira la República, resulta suicida salir a buscar el voto sin asumir de frente la injusta distribución del ingreso.
Invocar a la confianza ciudadana, sin tener a la vista el descenso brutal en la calidad de los servicios públicos, la crisis del modelo educativo y el desabasto en los sistemas de salud.
La inevitable rabia popular ante una todopoderosa delincuencia organizada que sobrevive eficientemente a todas las promesas y planes de seguridad pública.
Esa criminalidad que demuestra ser inmune a los rimbombantes operativos de corporaciones civiles y castrenses, cuyo fracaso asoma a la vuelta de la esquina.
El siguiente fin de semana, entre vehículos quemados, enemigos mutilados y daños colaterales a familias inocentes.
De aquí la problemática para quienes les toque defender la causa de un partido que se encuentre en el poder.
Los abanderados panistas en Tamaulipas y los priístas dentro del plano nacional. Más difícil todavía, quienes buscan reelegirse.
¿Cómo decirle a la gente que tu propuesta es la mejor si representas a quien tiene una responsabilidad directa en el actual estado de cosas?
A manera de reacción inmediata, un consejo elemental apunta a señalar avances donde los haya, festinar historias de éxito, aunque llegar a dicha conclusión no exige mucha ciencia. Verdad de Perogrullo.
El problema viene cuando el estrépito de las carencias ahoga con creces a la dulce melodía de los avances.
Cuando el reclamo popular les salta a la cara en cada colonia visitada.
Es tiempo entonces del “plan B”, aquel truco que el viejo PRI, en sus malabares de supervivencia, ideó como la acción de “romper para estabilizar.”
Ante la inefectividad de la música celestial, el candidato tiene que mostrarse crítico hacia el sistema que lo parió.
La estructura, el gobierno y el partido que lo patrocinan.
Y lo debe hacer, aún a costa de menoscabar sus nexos con ese poder donde, en buena medida, descansa su posibilidad de triunfo.
Tarea ingrata, ciertamente, porque lastima afectos cercanos, debilita amistades, vulnera viejas lealtades, deteriora compromisos y puede provocar efectos indeseables, acaso contrarios al propósito buscado.
Labor, por cierto, complicadísima para hombres como JOSÉ ANTONIO MEADE que (por principio) no puede desviar la culpa a regímenes anteriores ni responsabilizar de los males a gobiernos de partidos distintos.
Y la sencilla razón es que ha colaborado en los primeros planos con los últimos cuatro, sin distingo de siglas, a saber: ZEDILLO, FOX, CALDERÓN y PEÑA NIETO.
Problema similar enfrentan en el plano regional, los alcaldes que buscan ser ratificados en el cargo, como los priístas de Tampico, Victoria y Matamoros, MAGDALENA PERAZA, OSCAR ALMARAZ y CHUCHÍN DE LA GARZA.
O los panistas de Nuevo Laredo, Reynosa y Madero, ENRIQUE RIVAS CUELLAR, MAKI ORTIZ y ANDRÉS ZORRILLA.
Preguntas tan sencillas como constatar si sus respectivas áreas metropolitanas son más seguras ahora que cuando llegaron.
Si hay menos baches, mejores vías de acceso a las colonias, el camión de la basura pasa más puntual y el procesamiento de los desechos sólidos es más eficiente.
Eso y saber cuanto se avanzó en pavimentación, banquetas o luminarias, ¿se tiene (ojo) una ruta de asignación más transparente en contratos de proveedurías, obras y servicios públicos?
¿O seguimos con las mismas mañas, acaso reforzadas por la hipocritona estrategia del disimulo, aquella útil dicotomía de los vicios privados y las virtudes públicas?
Lo comenté arriba, en párrafos anteriores: el estrépito de las carencias ahoga con creces a la dulce melodía de los avances.
Pero si resulta difícil decirles que tomen distancia crítica hacia el equipo y partido de donde provienen, mire usted, en estos tiempos reeleccionistas, todavía más utópico sería exigirles la autocrítica.
¿En qué has fallado, qué te faltó por hacer, dónde quisiste y no pudiste?...
Imposibles, no, por favor. Acaso digan que para señalar sus fallas está el pueblo, aunque (como además añaden que ellos son el pueblo) pues todo lo ven perfecto y entonces no hay fallas.
Pero resulta que cualquier plan de obra se funda en un diagnóstico. ¿Cómo visualizar lo que tienen por hacer si no saben siquiera dónde están parados, a fuerza de imponer, desde sus respectivos círculos íntimos, una fantasía de terciopelo?
Mientras tanto, afuera, la realidad les grita.


jueves, 12 de abril de 2018

¿Relevo o tapón?


Cd. Victoria, Tam. – Parecía un hecho consumado. La dirigencia estatal de MORENA así lo anunció, el propio CARLOS CANTUROSAS había buscado la nominación, hubo acuerdos, compromisos de palabra, flujo de información confirmatoria en medios, solo faltaba el registro formal.
Pero hete aquí. De la noche a la mañana, CANTUROSAS modificó su opinión, sacó su veinte, canceló planes. En su lugar va otro exalcalde laredano, el expriísta RAMÓN GARZA BARRIOS.
¿Qué pudo haber impulsado a un hombre con fama de “entrón”, empresario exitoso y con amigos poderosos para abortar un proyecto que ya estaba más que encaminado?
En la víspera se habló de amenazas, del arresto de su tío RODOLFO JORGE CANTÚ quien (a la vista de los acontecimientos) estaría siendo utilizado como rehén. Lo cual conlleva al temor de que la espiral de amagos se extienda a toda la familia.
Para el consumo público, la explicación peca de telegráfica y se remite a decir que “no están dadas las condiciones” para que CARLOS participe. Punto.
En el espacio privado y semiprivado (no se diga en los mentideros de café y cantina) se dicen muchas cosas. Aunque la duda es inevitable: ¿con GARZA BARRIOS sí existen las condiciones?, ¿cuál es la diferencia entre un gallo y el otro, ambos de MORENA?
Baste recordar que su administración (2008-2010) fue también auditada por aquel presunto desfalco en el llamado “Colector Campeche”.
Proyecto de obra donde el ayuntamiento de RAMÓN habría erogado 242 millones de pesos en 2 mil 200 metros de drenaje pluvial, aunque la empresa concesionada solo entregó 199 metros.
Dato curioso, quien investigó este caso y lo denunció ante la justicia, fue nada menos que el entonces alcalde CANTUROSAS (2013-2016) a través de su titular de Obras Públicas CARLOS GERMÁN DE ANDA.
Actual diputado local cuya oficina de gestoría fue vandalizada hace un par de semanas. Episodio que la policía minimizó, pese a que le dejaron por ahí un cartelón con amenazas dirigidas a los dos, DE ANDA y CANTUROSAS.
El mensaje era claro. Los instaba a retirarse de la contienda, mediante una frase categórica: “si no quieren poner en riesgo la integridad de sus familias”. Todo ello, con letra derechita, correctamente escrita, caligrafía educada, en espacios regulares, sin faltas de ortografía, en color azul.
Esto fue la última semana de marzo y coincidió con el referido arresto del tío RODOLFO JORGE CANTÚ, cuyo nombre parece metido con calzador en la investigación por homicidio del periodista CARLOS DOMÍNGUEZ.
Donde, por cierto, hay tres colegas detenidos en forma un tanto irregular. Policías sin uniforme fueron por ellos en un operativo más parecido a un “levantón” que a un arresto legal.
Ello, para luego incomunicarlos y (según familiares) someterlos a tortura buscando forzarlos a declarar que CANTUROSAS había ordenado el crimen.
Volteretas que da el destino, ante la renuncia de este último a la candidatura, su antiguo adversario GARZA BARRIOS entró al relevo para compartir (teóricamente) el mismo riesgo.
Enfrentar a un alcalde como ENRIQUE RIVAS CUELLAR, alérgico a los contrincantes de peso que puedan estorbar su proyecto reeleccionista.
Habrá que observar a RAMÓN para ver si en verdad tiene perfil de adversario franco, crítico, con hambre de gol y genuino deseo de triunfo.
O si únicamente llega para escenificar la farsa del “rival a modo” que RIVAS CUELLAR necesita para consumar su victoria y quedarse tres años más.
Desde luego, ya en campaña pueden pasar muchas cosas. Aunque por lo pronto no debemos olvidar que RAMÓN está reemplazando al hombre que le investigó sus cuentas, lo acusó penalmente de desfalco y le dejó un expediente que aún puede hacerse efectivo.
Dinero que se esfumó y cuyo paradero todavía convoca a la perplejidad ciudadana y el inevitable reclamo de justicia.
A menos (claro) que su nueva misión como candidato ficticio haya sido proyectada a cambio del mexicano carpetazo. Oferta, por cierto, difícil de rechazar.

miércoles, 11 de abril de 2018

Cadáver insepulto


Cd. Victoria, Tam. – Con JAIME RODRÍGUEZ, el Bronco, ocurre (en pequeño) un fenómeno similar al del ciudadano LÓPEZ OBRADOR. Tiene enemigos por legiones, pero también defensores en grado heroico que buscarán siempre volver irrespirable cualquier crítica a su desempeño.
Por esta razón, en el vecino estado de Nuevo León, alegrías y sinsabores se alternan, permutan, revierten, de acuerdo al parte noticioso de cada día.
¿Compite o no en la contienda presidencial?, ¿se va o se queda?, ¿le niegan el registro a su candidatura o una dividida votación en tribunales decide meterlo de última hora?
Si recordamos como fue su visita al congreso local, poco antes de solicitar licencia, entenderemos bien que existe una sólida base ciudadana (priísta, panista, perredista) que cruza los dedos de pies y manos para que JAIME ya no regrese.
Habemos paradoja. Son sus malquerientes quienes mayormente festejan el fallo judicial que lo mete de nuevo en la pelea. Y no desean su retorno porque resultó un rotundo fiasco como gobernador.
Los municipios de Monterrey y su zona conurbada siguen tan violentos como en los tiempos infaustos de RODRIGO MEDINA DE LA CRUZ.
Muchacho impune que solo unas cuantas horas lució el uniforme carcelario (naranja y vivos blancos) en el penal de Topo Chico, antes de que los defensores le devolvieran su libertad, aquel inolvidable 26 de enero de 2017.
Golpe anunciado desde campaña, el de JAIME contra el clan MEDINA, el entonces gobernador, su padre, hermanos, parentela amplia, compadres, socios, prestanombres.
Había dicho que al día siguiente de tomar posesión cargaría con toda la tribu, a la que culpaba de un extenso rosario delictivo. Peculado, contratismo venal, sobrefacturación, subrogaciones, trapacerías sin fin.
Aunque ya enfrascados en el ajedrez jurídico, el abogado MEDINA resultó mejor estratega que el agrónomo RODRÍGUEZ. Resquicios le sobran al primero frente a la brocha gorda del segundo.
El caso es que los vicios de gobiernos pasados tampoco se han corregido. Amén de una desastrosa relación con los medios reyneros, que en buena medida nos recuerda los desplantes de VICENTE FOX.
Oiga usted, una cosa es reducir las partidas de difusión en bien de la hacienda pública y otra muy distinta el enfrascarse en trifulcas interminables con los comunicadores, al tú por tú.
Ese empleo tan personal y peleonero de las redes sociales que, por cierto, nos recuerda a otro infame gladiador electrónico de nuestro tiempo, DONALD TRUMP.
Horror a quien horror merece, a ratos también ANDRÉS MANUEL parece caer en ese juego maniqueo de devolver golpe por golpe a columnistas y editores.
Aunque el tabasqueño lo hace desde su instrumento favorito, el micrófono, en pódiums de campaña, charlas banqueteras, entrevistas radiales y televisivas.
Olvidan, todos, una verdad de a kilo. Que los políticos van siempre de paso y sus ayudantes también, mientras los medios permanecen, con acopio de buena memoria, en calidad de virtud principal.
Y no se diga en redes, en las cuáles la censura es inexistente o, de plano, tan exigua que las partes afectadas han renunciado a frenar la crítica.
O aspiran solamente a responder mediante el vocinglerío de bots, robots, sicarios virtuales y robocops enmascarados en el anonimato, ruidosos, caros y comprobadamente inefectivos.
De conformarse la incorporación de JAIME en la boleta presidencial, la pregunta inmediata es qué función cumplirá en los debates. Interrogante que aplica al caso de MARGARITA ZAVALA.
Tarea (la de ambos) equiparable al llamado primer tercio en las corridas de toros. Trabajo de picadores, mire usted, esos señores gorditos que aparecen montados en caballos igualmente rechonchos y cuyo encargo consiste en fatigar con sus puyas a los toros más impetuosos.
Lo hizo DIEGO FERNÁNDEZ en 1994 contra el ingeniero CÁRDENAS SOLÓRZANO. Lo harán ahora el “Bronco” con LÓPEZ OBRADOR y MARGARITA con RICARDO ANAYA.
Carambola de cinco, torre de Babel.

lunes, 9 de abril de 2018

Forcejeos locales


Cd. Victoria, Tam. – No se presentan fáciles las campañas para el grupo político del gobernador CABEZA DE VACA en la zona fronteriza.
En Reynosa, amen de que la criminalidad sigue dando nota nacional cada tercer día, los dos candidatos principales (MORENA y PAN) son ajenos al equipo gobernante.
Desde finales de febrero se hizo patente que los planes de la cúpula estatal panista para imponer al diputado JOSÉ MARÍA, “Chuma”, MORENO IBARRA se toparon con piedra en el Comité Ejecutivo Nacional.
Dirigencia que en el papel se encuentra a cargo del abogado sonorense DAMIÁN ZEPEDA, aunque en el terreno práctico obedece a RICARDO ANAYA.
El caso es que “Chuma” MORENO tuvo que dar marcha atrás, soltar la nominación que creía ya asegurada y disciplinarse a la línea del altiplano, favorable a la reelección de la doctora MAKI ORTIZ.
Puntual, el propio “Chuma” acompañó a MAKI en su inscripción como candidata este fin de semana. Desplante digno de encomio, aunque más democrático habría sido que compitieran.
Mosaico de identidades en el atuendo de la candidata al registrarse. Azul panista el vestido, refulgente el sol azteca en su blazer y una mascada con aires de paliacate a la salud del movimiento naranja. Al ritmo de tralalá.
En la trinchera opositora se levanta de nuevo (ahora con más fuerza) la figura de JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL, licenciado en administración con apenas 40 años cumplidos, ha sido regidor, diputado plurinominal y candidato independiente a la alcaldía en 2016.
Cargo que busca de nuevo, pero abanderado por MORENA, con la misma filosofía proselitista que antes le conocimos. No gastar dinero en actos masivos, dando prioridad a visitas domiciliarias y redes sociales.
En Nuevo Laredo, el comité panista a cargo de KIKO ELIZONDO tuvo un margen más amplio de maniobra por lo que concierne al procedimiento interno.
Instrumentó con éxito la orden recibida de encaminar al alcalde ENRIQUE RIVAS CUÉLLAR como abanderado para un segundo periodo.
Se diría que el proceso doméstico fue muy terso, sin disidencia a la vista. Para la óptica albiazul, el candidato natural era RIVAS, jefe político de la plaza y hombre bien visto por el gobernador.
Lo difícil vendrá en la constitucional ante un antiguo compañero de armas, transformado en rival de peso completo, como es CARLOS CANTUROSAS.
Ya fue alcalde en dicho puerto, tiene un fuerte ascendente entre el empresariado binacional, se mueve bien en comunidades rurales, lo aceptan en los barrios populares y (algo muy importante) supo jugar sus piezas dentro del ajedrez político nacional.
Y lo hizo con sentido de la oportunidad, en un momento crucial, al enrocarse tras el parapeto de MORENA, haciendo de AMLO su guardaespaldas moral.
La situación no era para menos. Antes de ello fueron auditadas sus cuentas municipales y luego arrestado un familiar directo por presunta complicidad con el homicidio de un periodista.
En paralelo, CANTUROSAS también se ha quejado de amenazas contra su persona y por ello el cuarto de guerra de su entrante campaña prefiere sesionar del lado americano.
En la capital de Tamaulipas, sin subestimar el imán de taquilla que puede significar el panista XICOTENCATL GONZÁLEZ, es patente la fuerza del alcalde tricolor OSCAR ALMARAZ, con dos ventajas:
(1) El control sobre la estructura municipal que ha tenido a cargo y (2) su experiencia de años en la mecánica interna de los procesos electorales, la que dirige y supervisa personalmente.
Tumultuarios, por cierto, los registros de ALMARAZ en Victoria, ANDRÉS ZORRILLA en Madero y CHUCHO NADER en Tampico.
De la presidenta MAGDALENA PERAZA, sus paisanos comentan que ya muestra signos de agotamiento. Una parte de su corazón (o de su bolsillo) le aconseja seguir, aunque el resto de su cansada humanidad se desplaza a medio gas, entre bostezo y fastidio.

jueves, 5 de abril de 2018

Al final del túnel


Cd. Victoria, Tam. – Con un gabinete parchado y una plantilla de bajo perfil cierra su administración el presidente PEÑA NIETO, cuando faltan 88 días para los comicios y le restan 240 al régimen.
Ya no está MIGUEL ANGEL OSORIO en Gobernación, ni CÉSAR CAMACHO en el PRI, ni JESÚS MURILLO en PGR, ni ENRIQUE MARTÍNEZ en SAGARPA, ni aquella mancuerna de GAMBOA y BELTRONES operando desde ambas cámaras.
El propio LUIS VIDEGARAY dejó de ser el poderoso operador financiero en Hacienda, para convertirse en un desangelado canciller, cuya cercanía al gobierno de TRUMP es más lastre que ventaja.
El paisaje humano del primer equipo parece hoy poblado de rostros grises, empezando por ALFONSO NAVARRETE en SEGOB, ENRIQUE OCHOA en el PRI, JOSÉ ANTONIO GONZÁLEZ en SHCP, EVIEL PÉREZ en SEDESOL, ALBERTO ELÍAS como encargado de despacho en PGR y (desde este 4 de abril) BALTAZAR HINOJOSA en SAGARPA.
Como marca la costumbre, la tarde de este miércoles, PEÑA NIETO convocó a los medios al salón “LÓPEZ MATEOS” de Los Pinos donde se apareció flanqueado por el saliente encargado del despacho en SAGARPA, el subsecretario JORGE ARMANDO NARVAEZ y el propio BALTAZAR.
El mandatario todavía se dio oportunidad de bromear, cuando reparó en que había muchos diputados entre el público (“quien sabe por qué”, dijo). Sin duda, cuerpeando al matamorense, ahora excompañero de curul.
La dependencia en cuestión estaba acéfala desde el 16 de marzo cuando renunció JOSÉ CALZADA ROVIROSA, quedando en su lugar el subsecretario NARVÁEZ arriba citado.
Mucho se dijo entonces sobre la salida de CALZADA ROVIROSA, quien antes fue senador por Querétaro entre 2006 y 2009, para convertirse luego en gobernador, de 2009 a 2015.
Como titular de SAGARPA (2015-2018) una investigación de prensa conocida como la “Estafa Maestra”, lo involucró en un presunto desfalco por 220 MDP.
Labor periodística de grandes proporciones, elaborada por el portal ANIMAL POLÍTICO y la asociación civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), nutrida también por reportes de Excelsior, Proceso, Eje Central y el HuffPost.
La “Estafa Maestra” se hizo acreedora al Premio Ortega y Gasset de Periodismo 2018, en reconocimiento a la calidad de su investigación.
Aunque también se dijo que la salida de ROVIROSA tendría por motivo su designación al frente del Movimiento Territorial, para sumarse a la campaña de TOÑO MEADE. Importa señalar que ambas versiones no son excluyentes.
El caso es que SAGARPA se había quedado sin titular desde marzo y dicho hueco ahora será llenado por el excandidato del PRI a la gubernatura de Tamaulipas, diputado federal, exalcalde de Matamoros, dos veces secretario estatal, BALTAZAR HINOJOSA.
A quien su flamante jefe directo, ENRIQUE PEÑA NIETO, le señaló el mismo día tres prioridades de su encomienda.
(1) Mantener la expansión productiva del campo mexicano, (2) impulsar las exportaciones y (3) profundizar las acciones de desarrollo agrícola, ganadero y pesquero, incluyendo la tecnificación y mecanización del campo, con énfasis en la modernización de procesos y el incremento de su productividad. Todo eso.
Desde luego, en el cumplimiento regular de su gestión, como secretario encargado de los programas rurales y pesqueros, resulta inevitable que BALTAZAR deba visitar Tamaulipas.
Entidad que se distingue por su actividad agropecuaria y, desde luego, la pesca, renglones fundamentales de nuestra vida económica.
Vueltas que da la vida, por aquí deberá encontrarse con el adversario panista que lo derrotó en 2016, con quien sostuvo además debates muy ríspidos, el gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.
Bajo condiciones distintas, en un ánimo institucional, tiempo tendrán ambos de compartir escenarios, posar ante los medios, intercambiar sonrisas, abrazos y buenos deseos.
Todo sea por el bien del país.