viernes, 18 de agosto de 2017

TLC, PRI, UAT

Cd. Victoria, Tam. – Los gobernadores fronterizos observan un especial interés de ser escuchados en las negociaciones para renovar el Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y Estados Unidos.
Lo subraya FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA con dos argumentos centrales. Nuestra entidad es única por sus 17 cruces internacionales donde transita el 50% de las exportaciones a Estados Unidos.
Distinción especial para Tamaulipas sobre los otros cinco estados que comparten límites con el vecino país del norte, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja California.
La preocupación mexicana radica también en la divergencia sustantiva entre GEORGE HERBERT BUSH y DONALD TRUMP. El primero creía firmemente en el libre comercio.
El segundo basó su campaña en un discurso proteccionista y xenofóbico.
También hay diferencias en los interlocutores del lado mexicano. El entonces presidente CARLOS SALINAS fue promotor central del TLC desde el arranque de su gobierno.
Por el contrario, ENRIQUE PEÑA NIETO se ha tenido que subir al carro de la renegociación como un recurso defensivo ante la amenaza esgrimida por TRUMP en su campaña, de cancelar el tratado.
Una ventaja de PEÑA es que los tiempos de la negociación podrían ser más cortos, puesto que el TLC ya está elaborado, firmado y operando desde el primero de enero de 1994.
No se empieza desde cero. Las rondas actuales de negociación están focalizadas en los puntos específicos que un miembro en particular (Estados Unidos) desea revisar.
Aunque ello no significa que las cosas sean fáciles para México. Se sabe que TRUMP busca endurecer su postura sobre migración y una mayor avidez norteamericana en materia de hidrocarburos.
Para PEÑA NIETO no existe una oposición fuerte de partidos y cámaras como la tuvo SALINAS con el primer PRD de CUAUHTEMOC CÁRDENAS y un sector del PAN.
Ello, aunque SALINAS llegó a la firma del TLC en 1993 con la situación política bajo control y un alto nivel de aceptación en las encuestas.
Lo contrario de PEÑA, quien se ubica en un mínimo histórico que lo describe como el mandatario más cuestionado de los últimos años.
El colmillo de BUSH y su claridad de intenciones contrastan asimismo con la banalidad de TRUMP, su patética ignorancia y esa tendencia a variar de postura según sus estados de ánimo.

LOS REEMPLAZOS
Por otra parte, la atención de los medios regionales parece centrada en dos procesos de renovación como son (1) el del PRI estatal que (aunque a veces no lo parezca) es la primera fuerza opositora del Estado y, más reciente, (2) el relevo rectoral en la UAT.
Este jueves hubo encerrona en la sede estatal del tricolor donde participaron los tres finalistas: GUAJARDO, LUEBBERT y GUEVARA, junto al delegado JOSÉ MURAT.
Cada aspirante aprovechó la oportunidad para suavizar su discurso y desactivar la rispidez natural de los días previos.
Fenómeno que (justo es decirlo) no es privativo de Tamaulipas pues ocurre en todos los relevos donde la competencia suele calentar los ánimos.
Es así que GUAJARDO habló de armonía y de llevar el proceso en paz, LUEBBERT resaltó la buena comunicación entre los participantes y GUEVARA destacó la unidad como factor clave para obtener buenos resultados en 2018.
La elección será el 26 de agosto. El delegado MURAT negó que se pretenda una imposición del centro (“ya se hubiera hecho”) y dejó en claro que “no se va a permitir juego extraño, ni dados cargados, ni nada que se le parezca.”
En cuanto a la UAT, existe ya un consenso firme en torno al ingeniero JOSÉ SUÁREZ FERNANDEZ como prospecto firme para suceder al rector ETIENNE.
El perfil y trayectoria de SUÁREZ inspiran confianza. Sus años de servicio en la propia institución y los cargos de primer nivel que ha ejercido, parecen garantizarle el apoyo necesario.