Cd. Victoria, Tam. – Los
gobernadores fronterizos observan un especial interés de ser escuchados en las
negociaciones para renovar el Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y
Estados Unidos.
Lo
subraya FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA con dos argumentos centrales. Nuestra
entidad es única por sus 17 cruces internacionales donde transita el 50% de las
exportaciones a Estados Unidos.
Distinción
especial para Tamaulipas sobre los otros cinco estados que comparten límites
con el vecino país del norte, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Sonora y Baja
California.
La
preocupación mexicana radica también en la divergencia sustantiva entre GEORGE
HERBERT BUSH y DONALD TRUMP. El primero creía firmemente en el libre comercio.
El
segundo basó su campaña en un discurso proteccionista y xenofóbico.
También
hay diferencias en los interlocutores del lado mexicano. El entonces presidente
CARLOS SALINAS fue promotor central del TLC desde el arranque de su gobierno.
Por
el contrario, ENRIQUE PEÑA NIETO se ha tenido que subir al carro de la
renegociación como un recurso defensivo ante la amenaza esgrimida por TRUMP en
su campaña, de cancelar el tratado.
Una
ventaja de PEÑA es que los tiempos de la negociación podrían ser más cortos,
puesto que el TLC ya está elaborado, firmado y operando desde el primero de
enero de 1994.
No
se empieza desde cero. Las rondas actuales de negociación están focalizadas en los
puntos específicos que un miembro en particular (Estados Unidos) desea revisar.
Aunque
ello no significa que las cosas sean fáciles para México. Se sabe que TRUMP busca
endurecer su postura sobre migración y una mayor avidez norteamericana en
materia de hidrocarburos.
Para
PEÑA NIETO no existe una oposición fuerte de partidos y cámaras como la tuvo
SALINAS con el primer PRD de CUAUHTEMOC CÁRDENAS y un sector del PAN.
Ello,
aunque SALINAS llegó a la firma del TLC en 1993 con la situación política bajo
control y un alto nivel de aceptación en las encuestas.
Lo
contrario de PEÑA, quien se ubica en un mínimo histórico que lo describe como
el mandatario más cuestionado de los últimos años.
El
colmillo de BUSH y su claridad de intenciones contrastan asimismo con la banalidad
de TRUMP, su patética ignorancia y esa tendencia a variar de postura según sus
estados de ánimo.
LOS REEMPLAZOS
Por
otra parte, la atención de los medios regionales parece centrada en dos
procesos de renovación como son (1) el del PRI estatal que (aunque a veces no
lo parezca) es la primera fuerza opositora del Estado y, más reciente, (2) el
relevo rectoral en la UAT.
Este
jueves hubo encerrona en la sede estatal del tricolor donde participaron los
tres finalistas: GUAJARDO, LUEBBERT y GUEVARA, junto al delegado JOSÉ MURAT.
Cada
aspirante aprovechó la oportunidad para suavizar su discurso y desactivar la
rispidez natural de los días previos.
Fenómeno
que (justo es decirlo) no es privativo de Tamaulipas pues ocurre en todos los relevos
donde la competencia suele calentar los ánimos.
Es
así que GUAJARDO habló de armonía y de llevar el proceso en paz, LUEBBERT resaltó
la buena comunicación entre los participantes y GUEVARA destacó la unidad como
factor clave para obtener buenos resultados en 2018.
La
elección será el 26 de agosto. El delegado MURAT negó que se pretenda una
imposición del centro (“ya se hubiera hecho”) y dejó en claro que “no se va a
permitir juego extraño, ni dados cargados, ni nada que se le parezca.”
En
cuanto a la UAT, existe ya un consenso firme en torno al ingeniero JOSÉ SUÁREZ
FERNANDEZ como prospecto firme para suceder al rector ETIENNE.
El
perfil y trayectoria de SUÁREZ inspiran confianza. Sus años de servicio en la
propia institución y los cargos de primer nivel que ha ejercido, parecen garantizarle
el apoyo necesario.