lunes, 21 de agosto de 2017

PRI, la recta final

Cd. Victoria, Tam. – Semana de proselitismo para los tres aspirantes a presidir el Comité Estatal del PRI, SERGIO GUAJARDO, OSCAR LUEBBERT y ALEJANDRO GUEVARA, oriundos de Matamoros, Reynosa y Mante, respectivamente.
Cada cual deberá convencer a medio millar de consejeros que (1) su proyecto es mejor, más viable (2) están preparados para la urgente tarea de reconstruir la estructura partidista, sectores y organizaciones y (3) que la prioridad suprema de su mandato (más allá de ambiciones personales) será lograr el mejor resultado en 2018.
Circula la duda en el edificio tricolor en torno a la asistencia de los consejeros, cuántos van a participar realmente. Según voces, podrían ser alrededor de 300, aunque nada hay escrito. Igual puede ser una votación copiosa.
En cuanto a perfil académico, GUAJARDO es ingeniero agrónomo de la UAT, LUEBBERT es economista del ITESM y respecto a GUEVARA (bueno) su currícula oficial en el portal de la LXIII legislatura federal menciona la palabra “licenciatura”, sin especificar carrera ni institución.
Del mismo GUEVARA, el citado documento electrónico menciona la fecha de su cumpleaños (ya pronto, el 26 de agosto), aunque no el año de nacimiento ni su estado civil.
Ello, mientras LUEBBERT y GUAJARDO han hecho pública su edad y su condición de hombres casados.
El primero con MARÍA ESTHER CAMARGO y tiene tres hijos. El segundo con LUZ DEL CARMEN CASTELLANOS con quien también ha procreado tres vástagos.

TRAYECTORIAS
La terna de finalistas tiene en común su experiencia amplia en el servicio público, trayectoria de partido y cargos de elección popular.
Mientras GUAJARDO ha sido diputado local, GUEVARA es actualmente diputado federal con licencia y LUEBBERT ya fue diputado federal, alcalde y senador, amén de dirigente estatal de su partido, lo mismo que busca hoy.
Dos de ellos han ocupado puestos dentro del gabinete estatal. En Desarrollo Rural GUAJARDO y LUEBBERT en SEDESOL.
Sería largo citar al detalle los méritos de cada cual, aunque la hoja oficial de GUEVARA señala dos cargos de importancia estratégica: Coordinador de Información del CISEN y Coordinador General de Giras Presidenciales.
Ello, amén de su innegable amistad con el presidente ENRIQUE PEÑA NIETO, lo cual representa un envidiable punto a su favor, al menos de hoy al 2018.
En un audio que circuló la semana pasada, el delegado JOSÉ MURAT comentó que llegó a Tamaulipas tras resolver un proceso sucesorio similar en Baja California, donde hubo candidatura única.
Aceptó, sin embargo, que no hay dos entidades federativas iguales. Cada cual tiene una problemática particular que viene, sin duda, de su historia.

EL PROCEDIMIENTO
La tentación por la unidad descansa en que ha sido el método más socorrido desde hace 88 años, cuando la revolución se bajó del caballo para convertirse en partido y en instituciones.
Las fórmulas únicas han sido la regla. Aplicable no solo para elegir dirigentes locales, estatales y nacionales, sino también al nombrar candidatos, lo mismo de regidores, síndicos y alcaldes, que de diputados locales y federales (mayoría y pluri), senadurías y gubernaturas.
La competencia interna en este partido constituye una experiencia incipiente. No observa una práctica regular, sino que aparece y desaparece, como rara avis, de tiempo en tiempo, en forma intermitente.
Para decirlo pronto, los priístas están curtidos en la cultura del dedazo y la cargada, lo cual les funcionó de maravilla los primeros 70 años y todavía suele conservar cierta eficacia parcial, como se demostró en Baja California.
En Tamaulipas, a menos de una semana de que culmine el proceso, parece haberse consolidado el modelo de competencia. Experimental, sin duda, habrá oportunidad de comentar al respecto.