Cd.
Victoria, Tam. – La encuesta publicada
este lunes por EL UNIVERSAL, en colaboración con la agencia BUENDÍA y LAREDO, reviste
un interés que va más allá de sus números.
En efecto, los resultados colocan como
puntero a LÓPEZ OBRADOR (32%), con un registro alto para RICARDO ANAYA (26%);
el 16% para TOÑO MEADE; el 4% de MARGARITA ZAVALA y un 2% de JAIME RODRÍGUEZ.
El estudio posee el valor de reconocer las
puntuaciones más altas a dos personalidades que de diversas maneras han sostenido
roces con esa empresa editora.
En el caso de ANAYA, fue intenso el
litigio en tribunales contra las publicaciones de dicho diario en 2016 y 2017, sobre
presuntas huellas de riqueza inexplicable y un tren de vida familiar muy
superior a sus ingresos observados.
El pleito quedaría en algo parecido a un
empate técnico. En octubre pasado, un juez federal emitió un fallo calificando
de “inexacta” la información. Pero en ningún momento dijo que fuera falsa.
Importa subrayar que el hoy precandidato
albiazul se defendió por la vía del derecho, sin recurrir a la descalificación
ni al insulto.
Bastante más ruidoso fue el reclamo de
ANDRÉS MANUEL, quien desde diversos púlpitos ha calificado al mismo periódico
como “pasquín de la mafia del poder”.
Ello, en respuesta a los videos publicados
en abril de 2017 donde la diputada local y excandidata de MORENA a la alcaldía
de Las Choapas, Veracruz, EVA CADENA, recibía maletines con dinero, como
aportación clandestina a su partido.
Furibundo, AMLO llegó al colmo de utilizar
una referencia histórica a manera de contraataque, cuando dijo que EL UNIVERSAL
(fundado en 1916) había sido enemigo de la Revolución Mexicana.
Auténtica mariguanada, si recordamos que
tal episodio ocurrió hace más de 100 años y, por tanto, resulta cómico imputar
a los actuales dueños (la familia EALY) cualquier postura que haya asumido el entonces
director FÉLIX PALAVICINI (tabasqueño, por cierto, de Teapa).
Esa costumbre de satanizar a los medios
que lo critican no es de hoy. Entre 2006 y 2012, ANDRÉS MANUEL solía
despotricar contra el “duopolio televisivo” (Televisa, TV Azteca) y “la prensa
inmunda” que (según él) publicaba encuestas “cuchareadas”.
Curiosamente, el 12 de julio de 2017, en
entrevista concedida a RENÉ DELGADO para diario REFORMA, el mismo AMLO señaló a
los señores EMILIO AZCÁRRAGA y RICARDO SALINAS en su lista de “buenos
empresarios”.
Pero la sorpresa no termina ahí. Al
final de la charla, LÓPEZ OBRADOR halagó a su entrevistador al calificarlo como
“el mejor periodista de este país, en estos momentos.”
No le duraría mucho el amor. Al mes
siguiente, el 29 de agosto de 2017, desde su espacio en #Twitter, el mismo AMLO
despotricó contra diario REFORMA, llamándolo “prensa fifí, alquilada y
deshonesta”.
Ello, solo porque este medio cuestionó
la opacidad de MORENA en su método para seleccionar candidato. La pretendida
encuesta que (desde luego) jamás existió y únicamente sirvió para disfrazar el
autodedazo.
Y, bueno, tras conocerse este lunes el
sondeo de EL UNIVERSAL, el tabasqueño respondió como niño con juguete nuevo, al
declarar que “estamos arriba, nos ha ido muy bien”, “no es para presumir”
(pero) “estamos más de 15 puntos arriba en esta encuesta. Estamos muy bien y de
buenas."
Sin embargo, esos 32 puntos de AMLO,
aunque lo coloquen arriba, tienen un significado muy diferente para su
principal rival RICARDO ANAYA. Razonamiento que es necesario considerar.
La percepción del panista es que el
techo histórico de LÓPEZ OBRADOR se ubica precisamente en dicho rango, ya que obtuvo
35% en 2006 y 31% en 2012.
Concluyendo que el candidato de MORENA se
encuentra estancado y no va a pasar de ahí, mientras que el propio RICARDO (con
su actual 26%) tiene todavía un amplio margen para crecer. Veremos hasta dónde,
esto apenas empieza.