Cd. Victoria.- Entre noticias de un nuevo derrame de tóxicos en ríos de Sonora y hallazgos de más represas contenedoras de veneno generado por Grupo México, el tamaulipeco MARCO ANTONIO BERNAL, diputado que preside la comisión a cargo, presentó su informe.
La nota es que los
diputados encontraron al consorcio responsable de lo que califican como “el peor
desastre ambiental de esta industria en el país”.
Ante lo cuál aconsejan
sentar un “precedente ejemplar” para todo tipo de empresas que se dedican a la
explotación de recursos naturales.
Y señalan algunas
acciones básicas ante el corporativo que preside GERMAN LARREA.
Me permito subrayar
cuatro:
(1) La reparación de
daños en ríos de Sonora con fondos suficientes, más altos que los destinados
hasta hoy. Esto es, con “un piso inicial de 5 mil millones de pesos” que
comprenda “todos los aspectos básicos para la reactivación económica y social”
de la región afectada.
(2) La suspensión de
actividades de dicha compañía, evaluando además la factible “cancelación de la
concesión” otorgada a Grupo México.
(3) Exigir a la autoridad
competente el ejercicio de acciones civiles, penales, administrativas y
laborales para sancionar de manera ejemplar a la empresa y personas que
resulten responsables.
(4) Ello, amén de
contemplar la necesidad de elaborar (en calidad de “urgente”) un paquete
legislativo que fortalezca la “función reguladora y sancionadora” del Estado,
dotándolo de la capacidad para “actuar con prontitud” en casos de contingencia.
ANTES COAHUILA
Y es que el señor LARREA (segundo
hombre más rico del país, después de CARLOS SLIM) es todo un caso de
explotación abusiva de los recursos naturales sin la menor responsabilidad
hacia el medio ambiente y con muy mala reputación como patrón.
Necesariamente debemos
remitirnos al 19 de febrero de 2006, el desastre ocurrido en Pasta de Conchos, mina
de carbón en San Juan de Sabinas, en la región de Nueva Rosita, Coahuila.
El desprecio brutal hacia
la seguridad de los trabajadores se evidenció tras la explosión y derrumbe de
la mina donde quedaron atrapadas más de 65 personas.
Nada se investigó, era el
último año de VICENTE FOX y el contubernio del gobierno federal con Grupo
México se hizo patente cuando la investigación jamás deslindó responsabilidades.
Ello, pese a que había
evidencias de una concentración excesiva de gas metano, muy superior a los
estándares legales establecidos en materia de seguridad laboral.
Ese mismo desprecio que
luego demostraría el consorcio en su operación de la empresa minera en Sonora, la
ausencia del cuidado más elemental al ecosistema circundante.
MAL Y DE MALAS
Este fin de semana fue
pródigo en noticias en torno a la situación de Grupo México.
La pospuesta reunión
entre el secretario de Gobernación MIGUEL ANGEL OSORIO y el gobernador panista
de Sonora GUILLERMO PADRÉS finamente ocurrió.
Y uno de sus primeros
efectos sería la noticia dada más tarde de que PADRÉS rompía públicamente su
relación con GERMÁN LARREA, remitiéndolo para cualquier asunto a las
dependencias federales correspondientes.
Llegaba a su fin, pues, la
amistad íntima (complicidad, diríase) entre el gobierno blanquiazul con sede en
Hermosillo y Grupo México.
La pinza se fue cerrando.
También al finalizar la semana, los noticieros de TELEVISA informaron que
GERMÁN LARREA dejaba de pertenecer al consejo de administración de dicha empresa
televisora.
Ello, tras considerar su
presidente EMILIO AZCARRAGA JEAN que LARREA incurría en conflicto de intereses
al participar como empresario en la puja por las nuevas concesiones de
televisión abierta hoy concursadas por el gobierno federal.
Por cierto en el último
párrafo de su columna “En Privado” del pasado jueves 18 de septiembre, JOAQUÍN
LÓPEZ DÓRIGA dejó un mensaje interesante. Escribe, textual:
“LARREA siga dando sus versiones y repitiendo sus amenazas, de las que lo hago directamente responsable.”
“LARREA siga dando sus versiones y repitiendo sus amenazas, de las que lo hago directamente responsable.”
Amenazas, en efecto, así
tal cuál.