Cd. Victoria.- Se han vuelto recurrentes las
visitas a Tamaulipas de MIGUEL ANGEL OSORIO CHONG, el titular de SEGOB más
poderoso en los últimos 35 años, desde los tiempos de JESÚS REYES HEROLES.
Y pisa fuerte OSORIO en el papel y en la práctica.
Se recordará que apenas entronizado PEÑA NIETO en Los Pinos, quedó bien claro
que el titular de Gobernación sería jefe de gabinete.
Es decir: toda la confianza.
Ello, amen de absorber las funciones policíacas y
penitenciarias de la desaparecida Secretaría de Seguridad, de la que salió por
piernas GENARO GARCÍA LUNA, hoy a salto de mata.
La seguridad (se dijo a partir de entonces) estaría
orientada bajo un criterio más amplio que el meramente delictivo, con el
cimiento firme de la gobernabilidad, la gobernanza.
Cercana la relación con PEÑA NIETO desde que ambos
fueron gobernadores (Hidalgo y Edomex, entidades limítrofes) sobre las espaldas
de OSORIO recae buena parte de la responsabilidad en materia de seguridad
nacional.
AJUSTES CONCEPTUALES
¿La política interior se maneja con criterio de
policía?
En el mejor de los casos, la seguridad ciudadana se
maneja con sentido político.
O combinación de ambas, como acostumbraban, entre
otros, MANUEL BARTLETT y FERNANDO GUTIERREZ BARRIOS.
Lo cuál, oiga usted, es algo semejante a la
proverbial rifa del tigre.
Para bien y para mal, de la paz mexicana podría
depender el futuro político de MIGUEL ANGEL, aunque también su consagración.
Reto algo duro, desafío para quien lo quiera ver, lo
sabe, entre otras, la tampiqueña PALOMA GUILLEN, de estratégica función a la
vera de Bucareli.
Detallista, meticulosa en el análisis, de
inteligencia fina y disciplinada. Austera.
Mujer de capacidades comprobadas, sabiduría de
escritorio, algo infortunada en la lid electoral, pero de innegable profundidad
a la hora del diagnóstico.
Otra opción es que una vez pasando la elección
federal mediera (y en función de los resultados positivos que se esperan de él)
el abogado OSORIO se proyecte hacia el menos problemático y más misericordioso
ambiente de SEDESOL.
Con esto dejaría su lugar a MANLIO FABIO BELTRONES,
cuyos lances de grandeza no son novedad y quien parecería exigir a gritos la
silla de su hacedor y antiguo jefe GUTIERREZ BARRIOS.
Sobre el particular, necesario es tomar nota que el
tamaulipeco más cercano a Don BELTRONE es, por supuesto, el matamorense MARCO
BERNAL.
EL CHICO DE MANTE
Activo y propositivo, el joven aspirante a todo lo
que se ofrezca, a la sazón jefe de giras presidencial, mantense, cañero, ALEJANDRO
GUEVARA COBOS, parece estarle reclamando a la vida lo que en justicia cree
merecer. Y lo hace recio y quedito.
Rápido de reflejos, hábil en la gambeta, sabe
moverse a velocidad en los entretelones políticos. Va y viene, toca el balón
por ambas bandas, tiene el afecto comprobado (y esto es real) del presidente
PEÑA NIETO.
Los viejos dicen que le falta un poquitín de pátina.
Aunque algo es claro: llegue o no a lo que hoy busca, su capital personal ya
luce abultado.
Es decir, tendrá un lugar beligerante en la
contienda y pueda ser el fiel de la balanza en la decisión final. Su opinión
será escuchada y, aunque no logre su cometido, acaso quiera vetar.
Lo cuál lo ubicaría en un primerísimo lugar dentro
del gabinete entrante, siempre y cuando el PRI gane la justa sucesoria de EGIDIO
TORRE.
De ser así, ALEJANDRO tendría asegurado un lugar en
el primer equipo de quien venga, para proyectarse luego hacia el senado, como
hicieron OSCAR LUEBBERT y LAURA GARZA con YARRINGTON.
Y BUENO…
Agradecimiento doble, mirando atrás y adelante. La
vida tiene ciclos y este 2014 cumplí uno. Tras década y pico, creo necesario
dejar constancia de mi agradecimiento a quienes fueron anfitriones de mis
tareas periodísticas, JOSE y ENRIQUE CÁRDENAS DEL AVELLANO, en El Diario de
Ciudad Victoria y en Organización Radiofónica Tamaulipeca.
Y, desde luego, al maquinista mayor del EXPRESO, que
hoy me recibe de nueva cuenta con la generosidad de siempre: PEDRO ALFONSO
GARCIA.