martes, 28 de agosto de 2012

Los conjurados de Agosto


Cd. Victoria, Tam.- Llamativa en términos mediáticos, aunque coyuntural y de incierto futuro, la alianza PAN-PRD que este lunes se habría fraguado teniendo por escenario el restaurante de un hotel capitalino.
Fondo y forma, a los pocos minutos de registradas, daban la vuelta al país esas imágenes de seis varones y una dama departiendo amigablemente en plena transición legislativa.
Ahí estuvieron los dirigentes nacionales de ambos partidos GUSTAVO MADERO y CHUCHO ZAMBRANO, los entrantes líderes de las fracciones parlamentarias en la cámara baja: LUIS ALBERTO VILLARREAL del PAN y SILVANO AUREOLES del PRD.
Desde luego, sus equivalentes en el senado: el panista ERNESTO CORDERO y el perredista LUIS MIGUEL BARBOSA.
Cerrando el círculo, la exjefa de la delegación capitalina Miguel Hidalgo, hoy senadora electa albiazul GABRIELA CUEVAS.
Ideologías opuestas, se antoja utópico que las corbatas azules y las amarillas puedan lograr acuerdos sustantivos en renglones como la reforma fiscal, laboral y energética.
Por ello la agenda común que ellos mismos se encargaron de divulgar está centrada en asuntos de orden más político como la regulación a los medios, el uso de recursos públicos con fines electorales, la transparencia y el combate a la corrupción.
También se habló de un mayor control a la deuda pública de los gobiernos estatales, lo cuál se antoja fácil de proponer aunque difícil de aterrizar.
Este primero de septiembre se materializa la renovación del congreso, en ambas cámaras, escaños y curules, tal cuál lo dispuso el voto en la urna, el pasado primero de julio.
Llegan los nuevos legisladores con una muy nutrida agenda de iniciativas a cuál más polémicas como la mayor participación privada en PEMEX y la reducción de subsidios a combustibles y electricidad.
En esto no hay duda que PAN y PRD se ubicarán en trincheras contrarias, aunque eventualmente pudieran coincidir en la propuesta de reducir las adjudicaciones directas y aumentar las licitaciones abiertas en PEMEX.
La reforma laboral es todavía un misterio, aunque si el modelo son sus equivalentes europeos (Francia, España) se antoja obvio que la izquierda mexicana se opondrá frontalmente a cualquier remiendo que considere contrario a las conquistas obreras consagradas en la Constitución de 1917.
En este renglón estarán más cerca, sin duda, el PAN y el PRI.
En cuanto al replanteamiento de la vida sindical y la necesidad de transparencia que las bases trabajadoras reclaman de sus cúpulas, la dificultad es para el PRI en cuyo equipo juegan los principales beneficiarios del corporativismo mexicano, como el dirigente minero NAPOLEÓN GÓMEZ URRUTIA, el petrolero CARLOS ROMERO DESCHAMPS y la maestra ELBA ESTHER GORDILLO.
En la reforma fiscal, todo indica que no hay todavía un consenso claro hacia el interior mismo del Partido Revolucionario Institucional, pues figuras de la talla de MANLIO FABIO BELTRONES han manifestado su oposición a rubros como la aplicación del IVA generalizado.
Acaso todos estén de acuerdo en que el sistema tributario requiere simplificación, aunque dicho reclamo ha sido consigna de las últimas cuatro o cinco campañas presidenciales.
Por otra parte, los concesionarios de medios electrónicos deberán estar muy atentos con ese proyecto que pretende reducir las barreras a la participación extranjera en telecomunicaciones, incluyendo la respectiva propiedad accionaria.
Desde luego, en la apertura de mercados para una mayor competencia en la televisión abierta, ya FELIPE CALDERÓN dio un primer paso al anunciar la licitación de dos canales más de cobertura nacional.
Habrá que ver como responden las diferentes bancadas partidistas a las propuestas de ENRIQUE PEÑA NIETO en torno a crear una instancia autónoma anticorrupción y transparentar los convenios de difusión que sostienen los gobiernos con distintos medios impresos y electrónicos.
También en esto saldrán chispas.