miércoles, 8 de octubre de 2014

Nichos del pasado heroico


Cd. Victoria.- Hoy Iguala, Guerrero, ayer Apatzingán, Michoacán, pueblos históricos convertidos en territorios de disputa mafiosa, cruentas batallas con las fuerzas del gobierno y sangre inocente derramada en abundancia.
Los nombres completos de estas municipalidades son de una sonoridad que nos remite a nuestras lecciones infantiles, a momentos entrañables frente a los viejos libros de texto: Apatzingán de la Constitución, Iguala de la Independencia.
En Apatzingán se promulga la primera carta magna de la historia patria (MORELOS, octubre 22 de 1814) y en Iguala se firma el plan que consuma la independencia (ITURBIDE y GUERRERO, febrero 24 de 1821).
Detalle curioso, a pesar de la importancia crucial que ambas localidades tuvieron en los albores del México soberano, hoy en día siguen siendo rústicos pueblitos donde el tiempo parece detenido.
El más reciente censo nacional (2010) contabilizó 118 mil habitantes en Iguala y 99 mil en Apatzingán.
Cifras que en poco corresponden al crecimiento demográfico general de un país que entre 1810 y 2014 creció de 6 a 120 millones de mexicanos.

BASTIONES DELICTIVOS
Apatzingán fue hasta hace poco asiento principal de la organización delictiva conocida como “Caballeros Templarios”.
De ahí era oriundo su líder máximo, NAZARIO MORENO, “El Chayo”, muerto en marzo pasado durante un enfrentamiento con fuerzas federales en el cercano municipio de Tumbiscatío.
Y, ojo al dato, Apatzingán también fue el eje de los llamados grupos de autodefensa organizados desde abajo, como iniciativas horizontales, para enfrentar a las bandas criminales.
La ciudad de Iguala, por su parte, es territorio bajo control del cartel autonombrado “Guerreros Unidos”, escisión de la Familia Michoacana que se formó con ex-operadores de los hermanos BELTRÁN LEYVA.
Su alcalde con licencia (prófugo) es el perredista JOSÉ LUIS ABARCA, a quien miembros del mismo partido habían acusado, desde hace al menos un año, de operar al servicio de la delincuencia.
El propio RENE BEJARANO, líder de la fracción Izquierda Democrática, puso a disposición del gobierno información completa, con pelos y señales, de las actividades criminales perpetradas en la zona de Iguala y que involucraban directamente al alcalde ABARCA y a varios miembros de su familia.
La razón por la cuál ni SEGOB ni PGR actuaron contra ABARCA habrá que buscarla en la filiación de este caballero dentro de la geografía perredista. Se le identifica con la tribu de los “Chuchos”, ZAMBRANO y ORTEGA.
Y, bueno, el grupo “Guerreros”, hasta hace poco era dirigido por un señor de nombre MARIO CASARRUBIAS (“El Sapo Guapo”) importante proveedor de droga en la ruta con destino a Chicago, Illinois, en cuyo trasiego emplean autobuses de línea y trailers cargados de fruta.
CASARRUBIAS fue detenido por elementos federales en la ciudad de Toluca el mes de mayo pasado y está sujeto a proceso.

AGENDA REGIONAL
En el cumpleaños 142 de la maestra ESTEFANÍA CASTAÑEDA, el gobernador EGIDIO TORRE CANTÚ encabezaría este miércoles un acto cívico y conmemorativo en la preprimaria del mismo nombre, esquina del 17 Juárez, a una cuadra de Palacio.
A las diez horas lo esperan en la Universidad La Salle (ULSA), en cuyo Campus de la Salud (ahora llamado “Dr. RODOLFO TORRE CANTÚ”) pondrán la primera piedra del hospital universitario.
Ello, mientras el secretario estatal de Seguridad, general ARTURO GUTIÉRREZ encabezó reuniones de trabajo en Reynosa con el general DAGOBERTO ESPINOZA, comandante de la Octava Zona Militar y los responsables de la base local de operaciones mixtas.
Lo cuál incluye a todos los miembros del llamado Grupo de Coordinación Tamaulipas (GCT), mandos militares, navales y de la Policía Federal.
El general GUTIÉRREZ viajó acompañado por el Subsecretario de Operación Policial, PABLO CASTELLANOS y los delegados regionales de dicha dependencia en Reynosa (LAURENCIO ORDAZ), Nuevo Laredo (RICARDO NIÑO) y San Fernando (MIGUEL MARTÍNEZ).