Cd.
Victoria.- Aplicando un criterio “open mind”, se
diría que no hay edad y nunca es tarde para que alguien rompa esquemas,
defienda su independencia de ideas y manifieste aspiraciones políticas, en este
caso hacia la gubernatura de Tamaulipas.
El problema del ingeniero y exrector
universitario HUMBERTO FILIZOLA HACES es el “timing” de su anunciado proyecto para
competir por la vía libre y fuera del PRI, al estilo del “Bronco” JAIME
RODRIGUEZ.
Por supuesto, FILIZOLA está a tiempo de
registrarse y para ello tiene el aval de una flamante reforma que permite contender
sin partido, en esa vereda independiente que ya registra algunas historias de
éxito, además del citado caso neoleonés.
Por dicha modalidad ganaron en junio pasado
personajes como MANUEL CLOUTHER JR la diputación de Culiacán y PEDRO KUMAMOTO
la diputación de Zapopan, entre otros.
El problema central para HUMBERTO será de
posicionamiento. ¿Cómo hacer para alcanzar a personalidades que en dicha pista
de carreras le llevan 30 vueltas de ventaja, como la terna principal citada
ayer en esta columna: ETIENNE, BERNAL, HINOJOSA?
Incluso entre los aspirantes de segundo
nivel, ¿Podría FILIZOLA arrebatar algunos reflectores a GUEVARA, CÁRDENAS, GUILLÉN,
RAMOS, CABEZA o CANTUROSAS?
EMULAR
AL BRONCO
Por principio, importa entender que el
fenómeno de JAIME RODRÍGUEZ es más deliberado de lo que aparenta. Aunque sus
votantes gusten de creer que surgió por generación espontánea, en verdad
fenómenos así no se dan en maceta.
Fue necesario un proceso de cultivo y una voluntad
clara en sectores importantes de la oligarquía empresarial para que alguien
como JAIME emergiera en respuesta a un nicho de mercado y con posibilidad real
de triunfo.
Detrás de JAIME se ubica un poderoso núcleo
del empresariado regiomontano que, se sintió insatisfecho con los partidos
formales (PRI, PAN, PRD) y optó por financiar un proyecto propio, por la vía independiente,
a la medida de sus necesidades.
En el caso de FILIZOLA, su decisión de
participar sin duda aportará algún interés extra a la (de por sí) competida
sucesión tamaulipeca. Pero de esto, a que pueda remontar a las figuras arriba
mencionadas, pues hombre, la distancia es larga.
Con todo el respeto que merece, nada impide
pensar que su impacto sería de un valor testimonial y meramente simbólico,
cercano al de GABRIEL QUADRI en 2012.
Ello, a menos que fuese una maniobra sujeta
a negociación, propia de quien le tira al diez para pegarle al ocho. ¿Se afana
en la gubernatura para que acaso le ofrezcan alcaldía, curul o cargo de
gabinete?
De ser así, habría que esperar alguna señal
del alto mando político al respecto y también del equipo que viene, cuya
identidad sabremos a más tardar en enero próximo.
SALARIOS,
AVANTE
En fin, el poder legislativo en Tamaulipas
que preside RAMIRO RAMOS mostró buenos reflejos al adelantarse a la mayor parte
de los congresos locales y avalar la reforma constitucional que desvincula al
salario mínimo del cálculo relacionado con multas, pensiones, hipotecas,
fianzas y similares.
Se movió aprisa la bancada tricolor, quizás
porque RAMIRO sí le está tirando al diez (gubernatura) para pegarle al ocho (alcaldía
laredana) y por ello anda urgido de mostrar cualidades de gestor, lances de
operador y agilidad ejecutiva.
Faltaría por ver (en Tamaulipas y en el
país entero) cuál será la medida universal que sustituya al salario mínimo en la
estimación de pagos arriba mencionada.
En medios financieros se sugiere que podrían
ser los UDIS, las unidades de inversión y valor instauradas por el Banco de
México desde 1995 para solventar obligaciones de crédito y operaciones
mercantiles. Deberán definirlo pronto.