Diez al Ocho

Cd. Victoria.- Desde su anuncio, la intención de ampliar el boulevard Tamaulipas (nuestra calle 8) suscitó un razonable conjunto de esperanzas.

Tendría camellones, dijeron, como el trabajo de alineamiento que en años previos se efectuó en la Avenida Sulaimán.

Le daría otro rostro (añadían) a la entrada más glamorosa del pueblo, la que viene y va hacia la metrópoli de referencia de cuyas aulas han egresado los últimos cuatro gobernadores.

La rúa por antonomasia que mira al norte en sus primeros 37 kilómetros, antes de que la curva del Barretal tuerza el camino hacia el poniente para reencontrarnos con la sierra.

Por ahí se ubica ese corredor al que, haciendo acopio de generosidad, en los años 90s empezamos a llamar “Zona Dorada”, espacio de límites difusos, sujetos a variación según la óptica generacional.

Si usted tiene más de 50 años la “Golden Zone” cueruda empieza en Carrera Torres e incluye fraccionamientos como Sierra Gorda, San José, Los Arcos y Las Palmas.

Si tiene menos, el límite sur estaría sobre el boulevard López Mateos, a partir del cruce donde hoy se miran de reojo un hotel y un supermercado plus.

TRANSFIGURACIÓN TOTAL

Siguiendo el camino del agua, territorios bajos y arbolados, las zonas residenciales se multiplican hacia Monterrey, igual que los pobres trepan a los cerros del sur.

Y este es el tramo, la ruta de los colegios, donde, no por casualidad, se ubican el Club Campestre, la casa del Obispo y la Casa de Gobierno, a la mitad de una zona de restaurantes que sin duda se verá impactada.

En medios municipales donde manda ALEJANDRO ETIENNE circuló semanas atrás la frase feliz de “ocho al ocho”, en referencia al número de carriles que comprenderá la ampliación una vez concluida en sus 2.4 kilómetros de magnitud.

Al gobernador EGIDIO TORRE CANTÚ le resulta más cercano el “diez al ocho”, en referencia a la calificación máxima (¿10 MB?) que de entrada otorga a un proyecto tan completo cuyo estudio previo contempla lo mismo el drenaje pluvial que asuntos como vialidad, alumbrado, banquetas y camellones.

También el diseño paisajístico, árboles incluidos: 134 encinos y 130 palmeras “Washingtonias” (con “i”, por favor) entre tezontle y cenizos.

ESCULTURA EN LA PUERTA

Llama la atención la rotonda al norte, frente a Liverpool. Más allá de su eficacia vial, la maqueta adelanta un conjunto escultórico donde sobresale cierta estructura metálica rojiza, entre hexaedros blancos.

Lo comento al amigo vía BlackBerry:

-“Me recuerda a la fuente de los cubos, de triste memoria.”

Para insistir (cito textual):

-“La escultura en la glorieta no tiene por qué ser geométrica. Hoy en día está de regreso el arte figurativo. En un punto tan importante, nada menos que la puerta principal de Victoria, podrías pensar en algo de mayor impacto, no necesariamente abstracto.”

Responde de inmediato:
-“Es lo único que aún no defino. Vale la pena abrirlo a propuestas ciudadanas. Menciona que te comenté.”

Y bien, dicho por el ingeniero TORRE, la puerta está abierta para escuchar, si surgieran, ideas alternativas.

En lo que construyen todo lo demás, en ese tiempo perentorio que se abre desde hoy, va la pregunta:

¿Qué podría quedar ahí?

ZIGZAG

*** LOCUTOR, maestro y amigo (todo junto) EDUARDO JAVIER FUENTES invita hoy al homenaje y remembranza al añorado señorón de la radio CARLOS ADRIÁN AVILÉS. *** LA CITA es en el auditorio del Centro Cultural Tamaulipas a las 17.30 horas. *** AMÉN de su amistad, disfruté muchas facetas del tocayo AVILÉS, desde luego esa extraordinaria agilidad narrativa, inteligente, fresca, precisa, que hacía de CARLOS un comentarista futbolero de estatura nacional. *** DE PRONTO pienso cuán útil sería para los estudiantes de comunicación que hoy sueñan con abrirse paso en el difícil campo de la crónica deportiva, el conocer, degustar, analizar, aquellos partidos memorables del Correcaminos y el Cuerudos, narrados por AVILÉS, VOGEL, ANDRÉS. *** PODRÍAN digitalizarse. *** ME PREGUNTO si todavía existen, contador ZURITA. ***