viernes, 22 de enero de 2021

Bad hombre, ¿solo uno?

Cd. Victoria.- El muro de TRUMP es una de esas historias que se observan fallidas desde su planteamiento mismo. Como proyecto nació muerto, aunque como argumento haya servido para cachar votos de los anglosajones pobres.
Necesario es decir que ello solamente le funcionó en 2016. Cuatro años después, en 2020, TRUMP perdió de calle la elección, ante la visible merma en su credibilidad.
Un muro del cual se ufanó groseramente que México lo habría de pagar. Ofensa imperdonable, como el criminalizar a los indocumentados o disponer redadas que separaron familias y enjaularon niños.
Desatino tras desatino con toda la mala entraña que caracterizó al magnate rubio. Racismo, xenofobia, supremacismo, clasismo, sexismo, homofobia.
Fue disruptivo con las organizaciones mundiales, ONU, OMS, UNESCO, muy adverso a los acuerdos globales que buscan defender el medio ambiente.
Belicoso con todas las regiones del mundo, China, Japón y Corea en Asia; sus aliados de Europa, amén de atizar el rencor contra el mundo musulmán. En América Latina, el principal blanco de sus odios fue México, desde 2016.
Por todo ello resulta inexplicable la actitud sumisa y acomodaticia del presidente LÓPEZ OBRADOR ante un gobierno tan deliberadamente hostil.
Su discurso de Washington (julio 8, 2020), en plena campaña reeleccionista representó un desatino formidable. A continuación me permito resumir sus dichos:
“Presidente TRUMP, como en los mejores tiempos de nuestras relaciones políticas, durante mi mandato como presidente de México, en vez de agravios hacia mi persona y, lo que estimo más importante, hacia mi país, hemos recibido de usted, comprensión y respeto.”
“Quise estar aquí para agradecerle al pueblo de Estados Unidos, a su gobierno y a usted, presidente TRUMP, por ser cada vez más respetuosos con nuestros paisanos mexicanos. Pero lo que más aprecio, es que usted nunca ha buscado imponernos nada que viole o vulnere nuestra soberanía.”
“Usted no ha pretendido tratarnos como colonia, sino que, por el contrario, ha honrado nuestra condición de nación independiente.”
“Por eso estoy aquí, para expresar al pueblo de Estados Unidos que su presidente se ha comportado hacia nosotros con gentileza y respeto. Nos ha tratado como lo que somos: un país y un pueblo digno, libre, democrático y soberano.” (concluye cita de AMLO).
 
SONORO BANDAZO
Importa recordar que en tiempos de ENRIQUE PEÑA NIETO, el entonces candidato LÓPEZ OBRADOR fue implacable con la actitud prudente de PEÑA ante las bravatas de DONALD.
Prometió contestar con la misma fuerza cada tuit antimexicano de TRUMP. Publicó incluso un libro al respecto (“Oye Trump”, Planeta, 2017), con el mismo tono de confrontación.
Sin embargo, tras su victoria de 2018, el cambio fue más que sustantivo, diametral, de 180 grados. Sin el menor rubor escribió una carta a su colega norteamericano donde decía encontrar similitudes entre ambas carreras políticas.
Dato poco creíble sin recordamos que TRUMP abandera posturas de grupos, intereses y sectores de inconfundible filiación conservadora, de extrema derecha. Mientras que AMLO y su partido MORENA surgieron en la ya larga tradición de izquierdas.
La carta fue, en sí misma, una capitulación brutal ante el déspota republicano. Pero vendrían más, una tras otra, en poco más de dos años.
Cuando los migrantes centroamericanos se incrementaron en número y pusieron los pelos de punta a la migra norteamericana, el gobierno obradorista no tuvo empacho en habilitar como tapón a su recién creada Guardia Nacional en la frontera sur del país.
Amén de extenderla en la frontera norte para consolidar sus tareas de contención, particularmente a los indocumentados del llamado “triángulo norte”: Guatemala, El Salvador, Honduras.
Vendría después todo el anecdotario postelectoral entre noviembre de 2020 y enero de 2021. Un LÓPEZ OBRADOR visiblemente molesto por la derrota republicana, que no quiso felicitar al ganador demócrata JOE BIDEN hasta muy entrado diciembre. Nueva ofensa.
Un mandatario mexicano que además concedió credibilidad a las fantasías de DONALD TRUMP sobre un presunto fraude electoral. Otro insulto.
Y que, para colmo, el 6 de enero pasado ni siquiera se inmutó por el ataque criminal perpetrado contra el Capitolio en Washington y tan solo lamentó la expulsión de TRUMP en redes sociales. Grosería tras grosería contra el entrante gobierno de BIDEN.
 
ENTRE LÍNEAS
Ante dicho cúmulo de agravios, ¿Cómo interpretar entonces las disposiciones tan favorables a México firmadas por el nuevo presidente estadounidense, al cancelar el muro fronterizo y reinstalar el programa DACA prohibido por TRUMP.
El DACA (Deferred Action for Childhood Arrivals) en español se traduce como Acción Diferida para los Llegados en la Infancia. Fue creado en 2012 por la administración OBAMA para otorgar protección a un número calculado de 750 mil jóvenes indocumentados (“dreamers”) que habían llegado de niños a Estados Unidos.
Los beneficiarios estuvieron recibiendo permisos de trabajo temporales, licencias de conducir y un número de seguridad social hasta que llegó TRUMP y lo suspendió.
Reactivar el DACA, como derogar el muro, son gestos amistosos del nuevo gobierno estadounidense hacia la nación mexicana.
Se sabe también que en el llamado despacho oval, el hoy presidente JOE BIDEN mandó poner un busto del legendario activista chicano CESAR CHÁVEZ, quien consagró su vida a la defensa de los migrantes y creó en 1962 la Asociación de Trabajadores Agrícolas en California (United Farm Workers, UFW).
Todos ellos son gestos de cortesía por parte de BIDEN que contrastan claramente con las desatenciones, desprecios y desaires de LÓPEZ OBRADOR. ¿Qué interpretación les damos?...
Por principio, (1) son atenciones al cada día más numeroso votante hispano (latino, le llaman) donde es mayoría la población de ascendencia mexicana.
Ello, además de que (2) el DACA, como creación de OBAMA, viene de un gobierno donde BIDEN fue vicepresidente. Hay cariño.
Y, lo más importante, para los buenos entendedores, (3) al tomar la iniciativa en estos rubros, se manda un mensaje de cordialidad muy directo al pueblo mexicano, que no pasa por el gobierno obradorista.
¿Cachetada con guante blanco?, por supuesto, pero es bastante más. Queda claro que BIDEN adoptó de manera inmediata y (sobre todo) UNILATERAL estas medidas benéficas para México. Lo cuál impide que AMLO las presuma como logros suyos.
Medidas que demás exhiben de manera clara la actitud abusiva de TRUMP, por quién ANDRÉS MANUEL siente y expresa todavía tanto afecto.
Se invierten entonces los significados. Para DONALD los mexicanos somos “bad hombres”, pero LÓPEZ OBRADOR es un “gran caballero” (“great gentleman, a friend of mine”).
Esto parece cambiar. Todo indica que con BIDEN será al revés. El trato caballeroso irá dirigido a los mexicanos. El “bad hombre” vive en Palacio Nacional.