Cd.
Victoria, Tam. – Aunque, de entrada,
todo esfuerzo estadístico es respetable, habría que irse con tiento a la hora
de calificar una encuesta de verdadera o espuria, fidedigna o cuchareada.
Lo interesante en la actual remesa de datos
es que sean cifras de abril, cuando ya despunta la lista definitiva de
opciones, tras el reconocimiento del INE a la candidatura independiente de
MARGARITA ZAVALA, así como la eliminación de JAIME RODRÍGUEZ y ARMANDO RÍOS
PITER.
Salvo algún inesperado fallo del
Tribunal Electoral, todo indica que el número de competidores se cerró en
cuatro, AMLO, ANAYA, MEADE y ZAVALA.
Aquí lo advertí hace algunas semanas,
estas son las primeras encuestas sustantivas a la hora de vislumbrar escenarios,
cuando ya aparece la lista exacta de competidores, ni uno más, ni uno menos.
Aunque nada impide proyecciones atípicas.
Ayer VICENTE FOX inició la semana festinando desde temprano unos números de la
agencia SUASOR Consultores y EL HERALDO de México, que contrastan drásticamente
con los que manejan otros medios.
El septuagenario expresidente aplaudió
como foca al descubrir que (por fin) alguien puso a su candidato PEPE MEADE en
segundo lugar, 6 puntos abajo de AMLO.
Las cifras de SUASOR publicadas este lunes
otorgan el 31% a LÓPEZ OBRADOR, 25% a MEADE, 22% a RICARDO ANAYA y 5% a
MARGARITA ZAVALA.
Pero ocurre que, en paralelo, el diario
EL PAÍS de Madrid, utilizando una herramienta más compleja (combinación de
encuestas, “poll de polls”) apunta en la dirección contraria, contabilizando un
41.2% para ANDRÉS MANUEL, 28.2% para RICARDO, 21.9% a JOSÉ ANTONIO y 5.6% a MARGARITA.
También con fecha 2 de abril, el
Barómetro Electoral Bloomberg sitúa a LÓPEZ OBRADOR en 44%, frente a 23% de
ANAYA, 20% de MEADE y 12% de MARGARITA.
El fundador y presidente de SUASOR, JUAN
MANUEL HERRERO, es por cierto un personajazo, por la variedad de oficios y ocupaciones
que observa en su currícula.
La opinión pública lo conoció primero
como futbolista en los lejanos años setenta cuando jugó en equipos como
América, Atlético Potosino y Veracruz. Entonces le llamaban MANOLO, “el Zurdito”,
HERRERO.
Pero también es actuario de profesión
por la UNAM, master y doctorado en demografía (en Bruselas, este último grado) ha
fungido como asesor técnico del equipo Toluca, colaborador en la Federación
Mexicana de Futbol y directivo de Chivas.
En su faceta de funcionario público ha
trabajado en el SAT, el IFE, el INEGI y alguna vez fue director del Registro Nacional de Población. Siendo además profesor
de la UNAM, la Anáhuac, la Universidad de Guadalajara y el Colegio de México.
En el verano de 2011
publicó un libro donde narra su trayectoria en el balompíe mexicano (“A la luz del futbol”), a cuya presentación acudieron
personalidades como el expresidente del IFE JOSÉ WOLDENBERG, el periodista JAVIER
SOLÓRZANO y el escritor RAFAEL PÉREZ GAY.
Aun así, necesario es decir que su
encuesta parece muy al gusto del periódico donde se publica, de línea editorial
distinguida por su conservadurismo. Inclinación más cercana al señor MEADE y
(desde luego) adversa al candidato de MORENA.
Volviendo con VICENTE FOX, no tiene
parangón dentro de la opinión pública nacional esa adicción patológica que demuestra
hacia el repudio público. Provocación continua, perenne, recurrente, a su interlocutor
principal, los seguidores de AMLO.
Masoquismo, acaso, pareciera gozar las
palizas que recibe a diario por parte de sus millares de impugnadores, cuando
colocan comentarios debajo de sus intervenciones en Twitter y los videos en
YouTube.
Insaciable, pide siempre más. Perversidad
pendiente de explicación, esa búsqueda deliberada del linchamiento colectivo
nada bueno aporta al proceso eleccionario. Infame espectáculo de quien busca la
fama revolcándose en fango ante los ojos de la república.