Cd. Victoria, Tam.-
A cualquiera le puede ocurrir, sin distingo de nivel económico, escolaridad o
lugar que ocupe en la pirámide social. Teóricamente hasta el presidente PEÑA
NIETO y el Procurador MURILLO KARAM podrían incurrir en ello, desde luego sin
saberlo.
El
papel moneda circula todo el día, todo el año, continuamente, de persona a
persona. Los recibimos no sólo en pago, también de cambio y, por rutina incontenible,
entran y salen de los cajeros automáticos, a lo largo y ancho de la república.
Y ello
ocurre con tal agilidad y en tales cantidades que jamás habría tiempo para
examinar uno a uno cada billete que llega y sale de nuestras manos, si
quisiéramos detectar cuál de ellos es falsificado.
Aquí en
Ciudad Victoria como en casi todo el país hay una cadena de farmacias que
ostenta junto a su caja registradora un letrero amenazador: la persona que
pague con un billete falso “será consignada a las autoridades.”
La pregunta, entre otras, es ¿quién se encargaría de retener al susodicho mientras llega la policía?
La pregunta, entre otras, es ¿quién se encargaría de retener al susodicho mientras llega la policía?
¿Un simple
empleado de un establecimiento comercial tiene facultades para privar de su
libertad a un ciudadano por lo general ajeno al proceso la fabricación o tráfico
de dinero ilícito?
Y la
duda cobra mayor validez si aceptamos el hecho de que -en la inmensa mayoría de
los casos- el portador es también una víctima de este negocio ilegal.
Tratar
como criminales a civiles inocentes que incluso se hicieron del billete inválido
por la vía de un cajero automático es algo que contradice de manera tajante la
filosofía del derecho que asume a toda persona inocente mientras no le
demuestren lo contrario.
YERROS DE LA JUSTICIA
El
asunto está hoy de moda en los medios tras la liberación de una modesta trabajadora doméstica, indígena y analfabeta quien
por pagar en una papelería con un “balín” de cien pesos pasó 34 meses en
prisión, incluyendo una temporada en las Islas Marías.
La
propia PGR ha
reconocido el registro de 196 juicios (consumados o en proceso) entre los
cuáles hay 20 personas que pagan con cárcel el “delito” (así, entre comillas)
de verse sorprendidos con dinero apócrifo.
Ciertamente,
la falsificación se ha disparado y la razón más poderosa es que los viejos
maestros de la copia artesanal han sido desplazados por nuevas generaciones que
trabajan con auxilio del moderno instrumental informático, escáneres de alta
resolución y programas de ilustración por computadora.
Hoy
mismo está en el penal de Puente Grande, Jalisco, un comerciante tapatío quien
por mercar un sombrero de palma con uno de 500 fue trasladado con rudeza
innecesaria a una cárcel de alta seguridad, construida para albergar asesinos
peligrosos.
¿Tiene
fundamento el considerar (a priori) como un delito consumado la tenencia de
papel moneda pirata?
Me
pregunto, incluso, cuántas veces habrá pasado por nuestras manos una “papa
caliente” como estas sin siquiera darnos cuenta.
Dirán
que la gente tiene la obligación de constatar la validez del dinero cuando
llega a sus manos. Se dice fácil y acaso sea factible cuando son dos o tres
ejemplares.
A
saber qué clase de utopía monstruosa tendría que ocurrir para que todos los
mexicanos hiciéramos alto en cada transacción del día para checar con lupa si cada
papelito tiene la marca de agua en su lugar, la ventana es realmente transparente
y el holograma resulta el correcto.
ZIGZAG
*** EL
AYUNTAMIENTO a cargo de ALEJANDRO ETIENNE firmó acuerdos de colaboración con
los CECATIS 76 y 93 para multiplicar las oportunidades de empleo a personas de
escasos recursos mediante talleres y cursos de capacitación. *** EL ALCALDE
también puso en marcha tareas de ampliación que reemplazan instalaciones de drenaje
obsoleto en el sector oriente de esta capital. *** EL BENEFICIO es para las
colonias Primavera, Ampliación Chapultepec, Ignacio Allende y Gloria Oriente,
así como los fraccionamientos Viento Huasteco. Los Olivos, Rincón de las
Montañas, Integración Familiar y Huertas Del Rió. ***