Cd.
Victoria, Tam.- Dos días con AMLO. Los fotógrafos se dieron
vuelo, no es asunto que se vea muy seguido, dos gabinetes juntos, federal y
estatal, compartiendo techo y reflectores, incluyendo los respectivos jefes de
los poderes ejecutivos, tamaulipeco y nacional.
Ciertamente, lo ruidoso y vistoso sería la “Mañanera” del día siguiente (miércoles) aunque la sustancia, para quien la busque, se ubica en la jornada anterior, la previa.
La noche de martes, sus exposiciones cansinas pero sustantivas, rubro por rubro, sobre el estado que guarda nuestra entidad desde la óptica chilanga.
Cómo nos ven nuestros pares federales, en haberes y deberes. Hay un venero de información al respecto, esperando recopilación, en las exposiciones de cada miembro del gabinete nacional.
Ellos también tienen un diagnóstico temático del desastre heredado por aquellos presuntos vientos del cambio que solo tempestades dejaron. Una visión que nos permite descubrir lo desconectada que estuvo la administración estatal de la realidad nacional.
En el panorama expuesto por el gobernador VILLARREAL ANAYA, destacarían varios tópicos que vale la pena citar ahora:
Una deuda pública histórica cercana a los 16 mil millones, la cuál se incrementó en 43% de 2016 a la fecha, es decir, durante el gobierno anterior. Un déficit de 2 mil millones de pesos, tan solo en lo que concierne al presente ejercicio anual de 2022.
La necesidad de que los productos primarios sean procesados y generen valor agregado en territorio tamaulipeco. Puso de ejemplo el sorgo y la naranja, donde la entidad ocupa el primero y segundo lugares nacionales.
Vendemos naranja, dice, pero compramos jugo de naranja. Vendemos sorgo en lugar de procesarlo y de aquí precisamente nace la justificación de la nueva planta de alimentos balanceados en San Fernando y lo explica así:
-“Somos el primer productor de sorgo, este año pasado las cosechas fueron de alrededor de un millón 600 mil toneladas y si aquí se procesan 50 toneladas a lo mejor es mucho.”
INFRAESTRUCTURA
En salud, importa destacar su exhorto a las dependencias federales como IMSS-Bienestar y el INSABI ante la escasez de medicamentos y materiales de curación. Suministros que en los próximos seis meses requieren de una “suficiencia presupuestal” con valor de 218 millones de pesos.
En el mismo sector se ubica la sustitución de tres hospitales generales en Nuevo Laredo, San Fernando y Ciudad Madero, así como la terminación del Hospital General de Matamoros.
Entre sus proyectos identificados como “de impacto nacional”, VILLARREAL ANAYA destacó el denominado PLHIGON (Planeación Hídrica del Golfo Norte), un sistema de acueductos que partiría del río Pánuco para llevar agua a puntos estratégicos en el centro y norte de la entidad.
La ya referida ampliación a cuatro carriles del tramo aún pendiente (80 kilómetros) en la carretera a Monterrey, entre Ciudad Victoria y el poblado de Magueyes (municipio de Mainero) sobre los límites estatales de Tamaulipas y Nuevo León.
También en Victoria, la segunda línea del acueducto de la presa “VICENTE GUERRERO”, ya anunciada por ANDRÉS MANUEL y expuesta en repetidas ocasiones por AMÉRICO.
El proyecto también confirmado por el propio AMLO de instalar en Nuevo Laredo la dirección de aduanas, como parte de la descentralización nacional emprendida por su gobierno. Ligado a ello está la construcción del llamado “Puente Internacional IV-V” en tierra laredana.
El proyecto referido en esta columna de un Recinto Fiscal para Ciudad Victoria, también denominado “puerto seco”. Obra que facilitaría al transporte de carga y sus contenedores la realización de trámites aduaneros mucho antes de llegar al punto de embarque marítimo, conectando rutas con ciudades fronterizas.
Sin olvidar el nuevo desarrollo portuario que incluye la ampliación de la aduana en Altamira y el puerto de altura en Matamoros, entre otros asuntos. La temática es muy amplia.
RECUENTO DE MISERIAS
Y bueno, no hay espacio por ahora para reseñar las largas y numerosas intervenciones del gabinete federal. Me quedo, por lo pronto, con lo que dijo la secretaria de Cultura ALEJANDRA FRAUSTO GUERRERO, cuando se quejó de la escasa o nula participación de Tamaulipas en las tareas relativas a este campo.
-“Debo señalar que nos importa coordinarnos ahora de manera mucho más cercana porque de los 758 beneficiarios en el sistema nacional de creadores, solamente tres provienen de Tamaulipas.”
O también que Tamaulipas no ha participado “como estado” en el programa de exposiciones del nuevo parque cultural Chapultepec, añadiendo que “nos gustaría contar con ustedes.”
Se recordará que con CABEZA DE VACA, el ITCA tuvo dos titulares de medio pelo, bajo perfil, capacidades muy limitadas, como fueron el administrador de empresas LUIS SOTTIL CICERO y la contadora pública SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO.
Ambos serían los destinatarios naturales de este diagnóstico presentado por la maestra FRAUSTO, sobre el Tamaulipas ausente. Nuestra penosa indigencia institucional en el concierto de la república.
Ese mismo reclamo que hoy tanto se utiliza para calificar el trabajo del gobierno blanquiazul en campos como salud, seguridad y educación, aplicaría también en cultura. El abandono deliberado.
Mezcla de ignorancia y ruindad, desprecio y ausencia de criterio. Nulo programa. El burdo ejercicio del poder avocado a la engorda de bolsillos y bajo el más despótico de los importamadrismos.
Ciertamente, lo ruidoso y vistoso sería la “Mañanera” del día siguiente (miércoles) aunque la sustancia, para quien la busque, se ubica en la jornada anterior, la previa.
La noche de martes, sus exposiciones cansinas pero sustantivas, rubro por rubro, sobre el estado que guarda nuestra entidad desde la óptica chilanga.
Cómo nos ven nuestros pares federales, en haberes y deberes. Hay un venero de información al respecto, esperando recopilación, en las exposiciones de cada miembro del gabinete nacional.
Ellos también tienen un diagnóstico temático del desastre heredado por aquellos presuntos vientos del cambio que solo tempestades dejaron. Una visión que nos permite descubrir lo desconectada que estuvo la administración estatal de la realidad nacional.
En el panorama expuesto por el gobernador VILLARREAL ANAYA, destacarían varios tópicos que vale la pena citar ahora:
Una deuda pública histórica cercana a los 16 mil millones, la cuál se incrementó en 43% de 2016 a la fecha, es decir, durante el gobierno anterior. Un déficit de 2 mil millones de pesos, tan solo en lo que concierne al presente ejercicio anual de 2022.
La necesidad de que los productos primarios sean procesados y generen valor agregado en territorio tamaulipeco. Puso de ejemplo el sorgo y la naranja, donde la entidad ocupa el primero y segundo lugares nacionales.
Vendemos naranja, dice, pero compramos jugo de naranja. Vendemos sorgo en lugar de procesarlo y de aquí precisamente nace la justificación de la nueva planta de alimentos balanceados en San Fernando y lo explica así:
-“Somos el primer productor de sorgo, este año pasado las cosechas fueron de alrededor de un millón 600 mil toneladas y si aquí se procesan 50 toneladas a lo mejor es mucho.”
INFRAESTRUCTURA
En salud, importa destacar su exhorto a las dependencias federales como IMSS-Bienestar y el INSABI ante la escasez de medicamentos y materiales de curación. Suministros que en los próximos seis meses requieren de una “suficiencia presupuestal” con valor de 218 millones de pesos.
En el mismo sector se ubica la sustitución de tres hospitales generales en Nuevo Laredo, San Fernando y Ciudad Madero, así como la terminación del Hospital General de Matamoros.
Entre sus proyectos identificados como “de impacto nacional”, VILLARREAL ANAYA destacó el denominado PLHIGON (Planeación Hídrica del Golfo Norte), un sistema de acueductos que partiría del río Pánuco para llevar agua a puntos estratégicos en el centro y norte de la entidad.
La ya referida ampliación a cuatro carriles del tramo aún pendiente (80 kilómetros) en la carretera a Monterrey, entre Ciudad Victoria y el poblado de Magueyes (municipio de Mainero) sobre los límites estatales de Tamaulipas y Nuevo León.
También en Victoria, la segunda línea del acueducto de la presa “VICENTE GUERRERO”, ya anunciada por ANDRÉS MANUEL y expuesta en repetidas ocasiones por AMÉRICO.
El proyecto también confirmado por el propio AMLO de instalar en Nuevo Laredo la dirección de aduanas, como parte de la descentralización nacional emprendida por su gobierno. Ligado a ello está la construcción del llamado “Puente Internacional IV-V” en tierra laredana.
El proyecto referido en esta columna de un Recinto Fiscal para Ciudad Victoria, también denominado “puerto seco”. Obra que facilitaría al transporte de carga y sus contenedores la realización de trámites aduaneros mucho antes de llegar al punto de embarque marítimo, conectando rutas con ciudades fronterizas.
Sin olvidar el nuevo desarrollo portuario que incluye la ampliación de la aduana en Altamira y el puerto de altura en Matamoros, entre otros asuntos. La temática es muy amplia.
RECUENTO DE MISERIAS
Y bueno, no hay espacio por ahora para reseñar las largas y numerosas intervenciones del gabinete federal. Me quedo, por lo pronto, con lo que dijo la secretaria de Cultura ALEJANDRA FRAUSTO GUERRERO, cuando se quejó de la escasa o nula participación de Tamaulipas en las tareas relativas a este campo.
-“Debo señalar que nos importa coordinarnos ahora de manera mucho más cercana porque de los 758 beneficiarios en el sistema nacional de creadores, solamente tres provienen de Tamaulipas.”
O también que Tamaulipas no ha participado “como estado” en el programa de exposiciones del nuevo parque cultural Chapultepec, añadiendo que “nos gustaría contar con ustedes.”
Se recordará que con CABEZA DE VACA, el ITCA tuvo dos titulares de medio pelo, bajo perfil, capacidades muy limitadas, como fueron el administrador de empresas LUIS SOTTIL CICERO y la contadora pública SANDRA LUZ GARCÍA GUAJARDO.
Ambos serían los destinatarios naturales de este diagnóstico presentado por la maestra FRAUSTO, sobre el Tamaulipas ausente. Nuestra penosa indigencia institucional en el concierto de la república.
Ese mismo reclamo que hoy tanto se utiliza para calificar el trabajo del gobierno blanquiazul en campos como salud, seguridad y educación, aplicaría también en cultura. El abandono deliberado.
Mezcla de ignorancia y ruindad, desprecio y ausencia de criterio. Nulo programa. El burdo ejercicio del poder avocado a la engorda de bolsillos y bajo el más despótico de los importamadrismos.
