miércoles, 15 de febrero de 2023

Cocido (o casi) el arroz

Cd. Victoria, Tam.- Tres candidatos, un escaño en juego, un resultado, ¿cómo viene la elección senatorial extraordinaria que tendrá lugar solamente en Tamaulipas el próximo domingo 19 de febrero?
Por principio, la competencia presenta desde ahora todo el aspecto de un estadio vacío. De esos que vimos muchos en los tiempos más álgidos de la pandemia.
Como una fiestecita bastante desairada. En otros sistemas democráticos obra la regla que exige un porcentaje mínimo de votos para que alguno de los competidores se haga merecedor al cargo en disputa.
Si ninguno de los candidatos alcanza ese mínimo porcentual, se declara desierto el puesto y se convoca a nuevos comicios. De existir esas leyes en México, tal vez la elección venidera entraría en dicha circunstancia.
En verdad, los tres candidatos hicieron campaña de mero trámite, entre otras cosas porque los cargos legislativos, por no manejar presupuesto de manera directa, tienen poco que ofrecer al electorado llano.
El aspirante a una alcaldía puede prometer acciones visibles y muy concretas como el pavimentar una calle, enjardinar un parque o renovar las luminarias de una ciudad entera.
¿Pero un legislador, diputado local, diputado federal, senador?... Digamos que su oferta no pasa del “voy a promover iniciativas que”, o bien “votaremos siempre en beneficio de”.
Baja, pues, el interés por la urna. Se desentiende la gente cuando los escucha, sobre todo si compiten en solitario, sin campaña alguna en paralelo, ni otras entidades federativas que estén viviendo lo mismo.
Tamaulipas y sólo Tamaulipas elige senador este domingo, por la sencilla razón de que el titular FAUSTINO LÓPEZ VARGAS falleció en octubre pasado de un desafortunado accidente carretero.
 
REEMPLAZO CARO
Ya lo comenté aquí, el ganador (ganadora) tendrá asegurada una dieta parlamentaria para los próximos 18 meses de gestión. Algo así como 36 quincenas, del entrante marzo al último día de agosto de 2024.
Por supuesto, existe el atractivo de la reelección, posibilidad que entra en vigor precisamente en el referido año 24. Lo cual abre la posibilidad de conservar (confirmar, ratificar, reciclar, alargar) la estancia senatorial hasta el año de 2030. Desde luego, si el voto lo permite.
Nos sigue faltando en la legislación electoral (acaso en la Carta Magna) algún parrafito que resuelva ausencias como la del doctor FAUSTINO por alguna vía que sea más rápida y barata que la convocatoria a la urna.
Cabe recordar, está en juego el escaño que fue de AMÉRICO, mismo que dejó en manos de su suplente al encaminarse el doctor VILLARREAL ANAYA a la competencia gubernamental.
En este sentido, quien falleció no fue el titular sino el sustituto, el doctor LÓPEZ VARGAS. Considerando el corto tiempo que le queda a la presente legislatura en la cámara alta, por lógica elemental haría falta alguna regla práctica que dispusiera el reemplazo eficaz, sin tanto argüende.
Cierto mecanismo del tipo escalafonario (acaso prelación) para ahorrarle al país (y al estado) la realización de toda una contienda electoral como la que vemos ahora con una mezcla de apatía y (siendo sinceros) bastante hueva.
 
NÚMEROS PREVIOS
En fin. Este martes 14 de febrero la casa encuestadora ELECTORALIA dio a conocer su más reciente estimación sobre las intenciones del voto, con miras a la contienda que hoy nos ocupa.
Según sus números, marcha de puntero JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL, candidato de la coalición MORENA-PT, con el 49% de las simpatías ciudadanas. Lo cual no es una sorpresa.
En segundo orden, con 35% (es decir,14 puntos abajo) se ubicaría la candidata reynosense y panista IMELDA SANMIGUEL SÁNCHEZ, abanderada también (igual que el Truko) por el PRI y el PRD.
Y en tercero, el gallo del PVEM, MANUEL MUÑOZ CANO, con 5%. Es decir, 44 puntos abajo de JOSÉ RAMÓN y 30 menos que IMELDA.
Cocido (o casi) está el arroz y esto lo vieron los medios regionales desde el principio. Alguien dirá que a IMELDA y MANUEL no los vence verdaderamente JOSÉ RAMÓN.
¿Entonces, quien?, pues hombre, los derrota el aburrimiento, la inapetencia cívica, el inmenso y sostenido bostezo tamaulipeco. Ese enemigo implacable y silencioso llamado abstención.
Y un detalle. Digamos que si la dama azul y el chico verde compitieron sin posibilidad alguna de triunfo, fue para hacer méritos. Su mirada está más adelante.
No olvidemos que los partidos suelen premiar con curules o escaños plurinominales a quienes ya se sacrificaron en contiendas previas buscando sin éxito cargos de elección directa.
Y esto los une con el anaranjado ARTURO DIEZ. La expectativa real de entrar en la lista de los afortunados, la lotería plurinominal que permite anotar carreras de caballito sin dar batazo mayor.
Perder ganando, podría ser la regla secreta de este febrero. Como el viejo GARRICK, reír con llanto y llorar a carcajadas.