Cd.
Victoria, Tam.- Este fin de semana el gobernador AMÉRICO VILLARREAL
ANAYA estará tres días en la ciudad y puerto fronterizo de Reynosa con una intensa
agenda de trabajo que además de encaminar sus tareas de inversión pública, tiene
un claro simbolismo político.
Hasta el 30 de septiembre pasado, Reynosa fue el feudo privado del exgobernador CABEZA DE VACA y su grupo. Bunker familiar, asiento y residencia de sus intereses más antiguos.
Lo dijo y lo cumplió. Fue la municipalidad donde FRANCISCO JAVIER decidió pasar la mayor parte de su sexenio, la localidad a la que viajaba constantemente y la que benefició de manera privilegiada.
De aquí la importancia de esta visita. El arribo del doctor VILLARREAL ANAYA con todo su gabinete es de un gran valor histórico.
Significa que está plantando su bandera en la tierra de su antecesor y en buena medida adversario que hoy se bate en retirada, huyendo de la justicia.
En semanas previas habíamos constatado la recurrencia de cierto modelo de trabajo en los viajes de AMÉRICO. Su decisión de hacer presencia con todo su equipo de gobierno a regiones como el sur conurbado y el altiplano desértico, el alguna vez llamado cuarto distrito.
SINERGIA CON EDILES
Desembarca, efectivamente, con su equipo principal. Hace contacto con alcaldes y cabildos en cada región y esto le permite ir elaborando un diagnóstico preciso de sus principales problemas para dar luego respuesta a sus necesidades.
El plan de esta vez para Reynosa, es ir al encuentro de los sectores productivos. Cámaras y grupos empresariales en todas las ramas de la industria y el comercio, agricultura y ganadería.
Hay preocupación actualmente en círculos patronales, ante las agresivas medidas recaudatorias emprendidas por el alcalde CARLOS, Makito, PEÑA ORTIZ.
Al hombre no le alcanza el dinero, se piensa que por los compromisos innombrables que fincó durante su campaña, a los cuales hay que pagar puntualmente sus mensualidades. Acreedores (oiga usted) algo toscos y con muy poca paciencia en materia de cobranzas.
Pero siguiendo con la gira, más importantes todavía serán los dos encuentros que el gobernador tiene programados para este fin de semana con los presidentes municipales de la franja fronteriza.
El primero con los alcaldes de la región norponiente, es decir, Nuevo Laredo, Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Camargo y Díaz Ordaz. El segundo será con los jefes edilicios de Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso y Matamoros.
En base a diagnóstico, se tratará la problemática común en todos los órdenes de gobierno más allá de los límites municipales, lo mismo en temas de seguridad, que en desarrollo agropecuario, salud, educación y comunicaciones.
Se trata de hacer región organizando el esfuerzo intermunicipal desde la visión del doctor AMÉRICO, para dar respuesta integral a la problemática fronteriza, sector por sector.
Que los alcaldes tomen conciencia y asuman su responsabilidad hacia los tiempos que vienen en materia de políticas públicas, economía, inversión, infraestructura.
DESPRECIO ANTIGUO
Y bueno, a propósito de CABEZA y el tema geográfico. En aquella triunfal euforia del 2016 y el 2017, el hombre llegó a prometer que permanecería la tercera parte de su tiempo en Reynosa, por representar dicho municipio (dijo) la tercera parte de la población estatal.
Desplante que, por principio, peca de despectivo hacia los demás tamaulipecos. Fanfarronada vulgar que para colmo resulta supinamente falsa.
Consultando la fuente oficial más reciente, los 700 mil habitantes que el INEGI le reconoce a Reynosa en el censo del 2020, ni lejanamente equivalen a la tercera parte de los 3 millones y medio (3.5 millones) que el mismo censo calcula para Tamaulipas.
Mire usted, cuestión de tumbarle ceros a las dos cantidades para simplificar la operación y todo se facilita. ¿A cuánto equivale 7 de 35?, a la quinta parte.
Pero en aquellos años no importaba mucho mentir, falsear, amedrentar, pues si algo no le cuadraba, lo hacía cuadrar. Y si alguien se inconformaba, para eso estaba el TRUKO y hasta los GOPES, que caray.
A Ciudad Victoria CABEZA le guardaba un rencor feroz cuya razón alguna vez conoceremos. A sus colaboradores les pidió al llegar que evitaran comprar casa en la capital de Tamaulipas porque alguna vez se tendrían que ir.
Y, en efecto, ya se fueron. El hombre nunca entendió a la gente, en buena medida porque no le interesó, no quiso. La empatía jamás estuvo entre sus prioridades.
AMBICIÓN SIN ALMA
Como cuando se cumplió el primer Día del Periodista bajo su mandato y en el mismo tono desdeñoso puntualizó que la libertad de expresión no es asunto de periodistas sino un derecho de todos los mexicanos.
Lo cual es cierto, aunque el ejercicio profesional de dicha libertad requiere de cuadros preparados y especializados dentro del conjunto de materias comprendido en las Ciencias de la Comunicación. Y estos son los periodistas.
Cuestión de trasladar dicho razonamiento a otros ámbitos de la vida profesional. Todos los mexicanos somos sujetos de derecho, pero necesitamos de los abogados como especialistas en la materia, quienes además viven de ello, a eso se dedican y qué bueno.
En sus primeros encuentros privados con editores locales, tanto FRANCISCO como su inseparable ingeniero VERÁSTEGUI tuvieron desplantes de sinceridad realmente escalofriantes.
La gente no les interesaba, decían. -“Nosotros venimos a hacer negocios”- y en dicho propósito bucanero se resumían prácticamente todos sus afanes de poder. Ni un milímetro más allá. Hoy empiezan a pagar las consecuencias.
Hasta el 30 de septiembre pasado, Reynosa fue el feudo privado del exgobernador CABEZA DE VACA y su grupo. Bunker familiar, asiento y residencia de sus intereses más antiguos.
Lo dijo y lo cumplió. Fue la municipalidad donde FRANCISCO JAVIER decidió pasar la mayor parte de su sexenio, la localidad a la que viajaba constantemente y la que benefició de manera privilegiada.
De aquí la importancia de esta visita. El arribo del doctor VILLARREAL ANAYA con todo su gabinete es de un gran valor histórico.
Significa que está plantando su bandera en la tierra de su antecesor y en buena medida adversario que hoy se bate en retirada, huyendo de la justicia.
En semanas previas habíamos constatado la recurrencia de cierto modelo de trabajo en los viajes de AMÉRICO. Su decisión de hacer presencia con todo su equipo de gobierno a regiones como el sur conurbado y el altiplano desértico, el alguna vez llamado cuarto distrito.
Desembarca, efectivamente, con su equipo principal. Hace contacto con alcaldes y cabildos en cada región y esto le permite ir elaborando un diagnóstico preciso de sus principales problemas para dar luego respuesta a sus necesidades.
El plan de esta vez para Reynosa, es ir al encuentro de los sectores productivos. Cámaras y grupos empresariales en todas las ramas de la industria y el comercio, agricultura y ganadería.
Hay preocupación actualmente en círculos patronales, ante las agresivas medidas recaudatorias emprendidas por el alcalde CARLOS, Makito, PEÑA ORTIZ.
Al hombre no le alcanza el dinero, se piensa que por los compromisos innombrables que fincó durante su campaña, a los cuales hay que pagar puntualmente sus mensualidades. Acreedores (oiga usted) algo toscos y con muy poca paciencia en materia de cobranzas.
Pero siguiendo con la gira, más importantes todavía serán los dos encuentros que el gobernador tiene programados para este fin de semana con los presidentes municipales de la franja fronteriza.
El primero con los alcaldes de la región norponiente, es decir, Nuevo Laredo, Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Camargo y Díaz Ordaz. El segundo será con los jefes edilicios de Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso y Matamoros.
En base a diagnóstico, se tratará la problemática común en todos los órdenes de gobierno más allá de los límites municipales, lo mismo en temas de seguridad, que en desarrollo agropecuario, salud, educación y comunicaciones.
Se trata de hacer región organizando el esfuerzo intermunicipal desde la visión del doctor AMÉRICO, para dar respuesta integral a la problemática fronteriza, sector por sector.
Que los alcaldes tomen conciencia y asuman su responsabilidad hacia los tiempos que vienen en materia de políticas públicas, economía, inversión, infraestructura.
Y bueno, a propósito de CABEZA y el tema geográfico. En aquella triunfal euforia del 2016 y el 2017, el hombre llegó a prometer que permanecería la tercera parte de su tiempo en Reynosa, por representar dicho municipio (dijo) la tercera parte de la población estatal.
Desplante que, por principio, peca de despectivo hacia los demás tamaulipecos. Fanfarronada vulgar que para colmo resulta supinamente falsa.
Consultando la fuente oficial más reciente, los 700 mil habitantes que el INEGI le reconoce a Reynosa en el censo del 2020, ni lejanamente equivalen a la tercera parte de los 3 millones y medio (3.5 millones) que el mismo censo calcula para Tamaulipas.
Mire usted, cuestión de tumbarle ceros a las dos cantidades para simplificar la operación y todo se facilita. ¿A cuánto equivale 7 de 35?, a la quinta parte.
Pero en aquellos años no importaba mucho mentir, falsear, amedrentar, pues si algo no le cuadraba, lo hacía cuadrar. Y si alguien se inconformaba, para eso estaba el TRUKO y hasta los GOPES, que caray.
A Ciudad Victoria CABEZA le guardaba un rencor feroz cuya razón alguna vez conoceremos. A sus colaboradores les pidió al llegar que evitaran comprar casa en la capital de Tamaulipas porque alguna vez se tendrían que ir.
Y, en efecto, ya se fueron. El hombre nunca entendió a la gente, en buena medida porque no le interesó, no quiso. La empatía jamás estuvo entre sus prioridades.
Como cuando se cumplió el primer Día del Periodista bajo su mandato y en el mismo tono desdeñoso puntualizó que la libertad de expresión no es asunto de periodistas sino un derecho de todos los mexicanos.
Lo cual es cierto, aunque el ejercicio profesional de dicha libertad requiere de cuadros preparados y especializados dentro del conjunto de materias comprendido en las Ciencias de la Comunicación. Y estos son los periodistas.
Cuestión de trasladar dicho razonamiento a otros ámbitos de la vida profesional. Todos los mexicanos somos sujetos de derecho, pero necesitamos de los abogados como especialistas en la materia, quienes además viven de ello, a eso se dedican y qué bueno.
En sus primeros encuentros privados con editores locales, tanto FRANCISCO como su inseparable ingeniero VERÁSTEGUI tuvieron desplantes de sinceridad realmente escalofriantes.
La gente no les interesaba, decían. -“Nosotros venimos a hacer negocios”- y en dicho propósito bucanero se resumían prácticamente todos sus afanes de poder. Ni un milímetro más allá. Hoy empiezan a pagar las consecuencias.
