Cd. Victoria, Tam.-
Este martes, el Presidente ENRIQUE PEÑA NIETO presentaría en sociedad su
proyecto de reforma financiera.
Misma que
en la víspera ha adelantado en medios (la agencia gubernamental NOTIMEX, entre
otros) su propósito de estimular el crédito interno para que la banca mexicana
“preste más y más barato”.
Clamor
de micro, pequeños y medianos empresarios que no nace de hoy, pues lo mismo
estuvo presente entre las justificaciones de JOSÉ LOPEZ PORTILLO para
nacionalizar la banca en 1982 que en los argumentos de CARLOS SALINAS (dos
sexenios después) para privatizarla de nuevo.
Que los
banqueros presten caro y cobren las perlas de la virgen por toda suerte de
servicios constituye un defecto estructural que no solamente afecta a
comerciantes, agricultores o manufactureros.
También
entierra las uñas al usuario convencional de dichos servicios, cuestión de
preguntar a cualquier tarjetahabiente.
Con los
banqueros originalmente privados, luego estatales y después reprivatizados, la
economía nacional parecería ilustrar, sexenio tras sexenio, el mito de SISIFO.
Recordará
usted, el rey griego condenado por los dioses a empujar una roca hasta la punta
de un cerro, tarea siempre inconclusa pues la gran piedra se precipitaba ladera
abajo una vez alcanzada la cima, obligándolo a reiniciar una y otra vez el
esfuerzo.
Acaso
por ello la pregunta más socorrida (¿En qué manos y en beneficio de quién se
encuentra el ahorro nacional?) fue tan válida en los 70 años del priísmo
original, como en la posterior docena panista y los 144 días de priísmo
restaurado que llevamos con PEÑA NIETO.
Otra
preocupación que surgió en la víspera es si tal medida llevará el visto bueno y
padrinazgo pleno del Pacto por México (el acuerdo interpartidista estrenado en
diciembre pasado) hoy que uno de sus firmantes (el PAN, por medio de su líder
GUSTAVO MADERO) se declara abiertamente “indispuesto” a presentarse en público
con sus iguales.
Ello,
en protesta contra el presunto uso electorero de la SEDESOL federal, denunciado
semanas atrás en Veracruz, lo cuál ha causado una verdadera tormenta mediática
sobre la humanidad de su titular ROSARIO ROBLES BERLANGA.
De
ROBLES se han dicho en poco tiempo demasiadas cosas. Como, por ejemplo, que
está utilizando la SEDESOL para crear desde el poder un nuevo partido político,
hasta que su renuncia podría ser la primera del gabinete.
Saliendo
al paso, el Presidente PEÑA NIETO realizó este fin de semana una defensa
decidida de ROSARIO durante el lanzamiento de la Cruzada contra el Hambre en
Zinacatlán, Chiapas, al cuál, por cierto, asistió el ex-mandatario carioca LUIZ
INÁCIO DA SILVA, LULA.
Al
espaldarazo presidencial han seguido acciones concretas que podríamos ubicar
dentro del imprescindible recuento de daños y la operación cicatriz, buscando
sellar a toda prisa las grietas hoy abiertas en el “Pacto por México”.
Entre
ellas, el cese de funcionarios de SEDESOL en la delegación veracruzana donde
brotó el problema.
Al
momento de escribir estas líneas (19 horas del lunes) la postura de MADERO no
había variado, insatisfecho con la simple destitución y en espera acaso de
medidas más severas contra los presuntos responsables.
El
incidente, no obstante, ubica el tema en el primer plano de la opinión pública
nacional.
Quienes
operen esta clase de servicios y programas relacionados con el desarrollo y de
impacto social inmediato (ayudas de todo tipo: rural, vivienda, educación,
becas) deberán poner sus barbas a remojar en todos los niveles.
Y esto
significa, entre otras virtudes, pulcritud y cuidado para no complicarle las
cosas a sus partidos de origen (y mire usted que hay alcaldes y gobernadores de
todas las corrientes políticas) para que las denuncias y descalificaciones de
dicha índole no infesten las campañas.
Que no
ocurra (como ya hemos visto en ocasiones anteriores) que los reclamos ocupen
espacios donde sería mejor ver y escuchar las ofertas programáticas de candidatos
y partidos.