lunes, 22 de abril de 2013

Justicia al banquillo


Cd. Victoria, Tam.- La liberación del general TOMÁS ÁNGELES DAUAHARE pone contra la pared al gobierno de FELIPE CALDERÓN. La gravedad de la afrenta perpetrada al sector castrense desborda en detalles críticos:
(1) El prestigio del general ÁNGELES, egresado del Colegio Militar y la Escuela Superior de Guerra, con una brillante hoja de servicios que incluye comandancias de batallón, jefaturas de zona, su desempeño como secretario particular de ENRIQUE CERVANTES en tiempos de ZEDILLO, su misión diplomática como agregado militar en la embajada de México en Washington y la Subsecretaría en la propia SEDENA, entre otros cargos.
(2) El ser miembro de un linaje militar forjado por varias generaciones y que incluye al jefe revolucionario FELIPE ÁNGELES, cuya legendaria lealtad al presidente MADERO dejó huella indeleble en los días y las horas más difíciles de la Decena Trágica (Febrero de 1913).
(3) La precipitada elucubración que armó la PGR de MARISELA MORALES para proceder contra ÁNGELES DAUAHARE, en base a testimonios endebles aportados por testigos protegidos.
(4) La mala química de ÁNGELES con el gabinete de seguridad panista, en particular con personajes como GUILLERMO GALVAN, GENARO GARCÍA LUNA y la señora MORALES.
(5) Las irregularidades cometidas durante su arresto y confinamiento el 15 mayo del 2012, sin permitir acceso a la familia, de lo cuál hay queja formal ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
(6) La convicción de que CALDERÓN “dio línea” (como tantas veces) para ejercer un uso partidista de la justicia cuando se enteró que ÁNGELES había participado en un foro de consulta sobre seguridad organizado por la Fundación COLOSIO durante la campaña de PEÑA NIETO.
(7) El miedo de CALDERÓN a que se convirtiera en titular de SEDENA un hombre como TOMÁS ÁNGELES quien ya había dado muestras de entereza durante la detención y juicio a generales corruptos como JESÚS GUTIÉRREZ REBOLLO y ARTURO ACOSTA CHAPARRO.
En fin, ya fuera de prisión, el involucrado estudia la posibilidad de presentar una demanda contra la mala justicia calderonista.
Significativo el que la propia SEDENA (la actual, la de SALVADOR CIENFUEGOS) haya boletinado su satisfacción por la libertad de ANGELES, expresando dicha secretaría (léase, el sector militar) “su reconocimiento a las instituciones encargadas de la procuración y administración de justicia.”
En el mismo lenguaje simbólico habría que interpretar las palabras de JESÚS MURILO KARAM en enero pasado cuando dijo que la PGR a su cargo no está únicamente para “meter culpables a la cárcel”, sino también “para sacar inocentes.”
Y, bueno, para entender la visión crítica de MURILLO, sin duda sigue siendo un documento valioso su discurso del 17 de diciembre pasado ante el Consejo de Seguridad, cuando dijo que, en los gobiernos panistas, los mexicanos:
-“Perdimos el propósito central de la investigación, violentando con frecuencia derechos fundamentales”, aludiendo a la utilización abusiva del arraigo y los testigos protegidos.
Días atrás, a principios del mismo diciembre, había adelantado el diagnóstico de encontrar una PGR “desmantelada”.
En este contexto hay que entender las dos demandas que, a través de sus abogados, planteó el exgobernador TOMÁS YARRINGTON contra MARISELA MORALES.
(1) Ante la PGR el 6 de diciembre pasado, pidiendo investigar presuntas irregularidades cometidas durante los cateos y aseguramientos realizados en sus oficinas del DF y una residencia de Matamoros.
(2) Y, al mes siguiente, ante la Cámara de Diputados, el 28 de enero, solicitando además un juicio político contra MARISELA como ex-servidora pública que, en el ámbito de sus atribuciones, habría incurrido en arbitrariedad, abuso o exceso de poder.
Ello, sin olvidar que entre los antecedentes de la ex-procuradora destaca su participación activa en el caso más crudo de politización de la justicia que se conozca.
El juicio de desafuero ordenado por FOX contra LÓPEZ OBRADOR, abortado en 2005.