domingo, 27 de septiembre de 2020

Iguala: danza de sombras

Cd. Victoria.- La historia es bien simple. Estamos ante un caso superlativo de fracaso institucional que incluyó la capitulación de los tres niveles de gobierno ante el poderío económico del crimen organizado. Punto.
Lo cual significa que carece de relevancia la cansada ineptitud de JESÚS MURILLO KARAM. O la observación de que los señores OSORIO y PEÑA compartían alguna suerte de animadversión hacia las normales rurales.
O si el PRD gobernaba Guerrero en la persona del expriísta ANGEL AGUIRRE RIVERO. O si el ayuntamiento de Iguala, en manos de JOSÉ LUIS ABARCA VELÁZQUEZ, llegó avalado por la Corriente “Nueva Izquierda” de los CHUCHOS, ORTEGA y ZAMBRANO.
Ni siquiera tiene peso que la normal “ISIDRO BURGOS” de Ayotzinapa fuera el alma mater de LUCIO CABAÑAS y GENARO VÁZQUEZ ROJAS, cabecillas guerrilleros en los años sesenta.
Ni que la antigua hacienda de Ayotzinapa fue repartida en tiempos del generalísimo JOSÉ MARÍA MORELOS y un interminable forcejeo por la tierra se libró desde entonces entre campesinos y caciques, para alargarse generaciones después en las sucesivas etapas de BENITO JUÁREZ, EMILIANO ZAPATA y LÁZARO CÁRDENAS.
Hay demasiados añadidos de carácter anecdótico que acaso ilustren, aporten colorido y tornen amena la lectura, pero poco ayudan a entender el episodio central.
Peor todavía, funcionan como distractores en la interpretación del caso, al desviar las miradas hacia detalles sin sustancia. Demasiadas notas de color. En todo caso se trata de datos suplementarios cuya magnificación oscurece el problema.
 
NEGOCIO GLOBAL
El problema fue estrictamente de negocios, en el sentido más literal del término, tal cual, sin mayores rodeos, dentro de la fría lógica del dinero.
El triángulo dorado de Iguala tiene su historia, desde los tiempos en que los cárteles de Medellín y Cali le marcaban el paso al mercado continental de estupefacientes con figuras legendarias como PABLO ESCOBAR GAVIRIA y la dinastía RODRÍGUEZ OREJUELA.
Negocio brutal, no exento de variables y altibajos en el comportamiento y gustos del consumidor, con determinaciones de orden geopolítico que también juegan un papel importante.
Al cerrar el siglo 20, el Departamento de Estado norteamericano reportó focos rojos en el cono sur y el Caribe. El dinero de la cocaína aceitaba guerrilla en Colombia y gobiernos hostiles al imperio, como el de MANUEL ANTONIO NORIEGA en Panamá.
En su arrebato anticomunista, la Casa Blanca barajaría como presuntos beneficiarios del narcodolar a líderes de izquierda como LULA, CHAVEZ, KIRCHNER, EVO y ORTEGA, entre otros.
Máxime cuando el caudal de la coca arrastró a los cubanos, si recordamos el sonado caso del general ARNALDO OCHOA y el coronel ANTONIO DE LA GUARDIA, funcionarios de élite que acabaron en el paredón, tras un severo juicio de guerra, por asuntos de narcotráfico.
Y hasta contrarrevolucionarios nicaragüenses como EDÉN PASTORA y FERNANDO, “el Negro”, CHAMORRO, cuyos negocios con el narco corren paralelos a la caída de NORIEGA y el juicio por corrupción contra el militar norteamericano OLIVER NORTH.
El origen del recurso es el mismo. El inmenso mercado norteamericano de la droga, dinero suficiente para hacer triangulaciones de todo tipo entre el mundo visible y el invisible; alimentar insurrecciones y patrocinar guerras cuando el congreso limita los recursos.
Preocupación gringa cada vez más evidente. La víbora estaría mordiéndose la cola; sus vicios nutriendo a gobiernos enemigos. En algún momento decidieron que esto tenía que parar y tomaron cartas en el asunto.
De aquí el proverbial cambio de paradigma que fue dibujándose al arranque de los noventas. Reconsiderar el estimulante principal del consumidor estadounidense (el componente “high”), buscando modificar los patrones de compra.
En pocas palabras, que la anfeta y la efedra cuya producción es global (y no focalizada) fueran desplazando al arbusto de la coca, producción exclusiva del cono sur. Diferencia importante.
Cambiar, pues, el ingrediente central de eso que llaman drogas de diseño. La sustancia “high” levanta los ánimos, pero la adormidera los equilibra, lleva al usuario a una más cómoda fase de meseta y facilita la formación de clientela segura, la mejor de todas, el comprador de largo plazo.
Ahí donde el posicionamiento es mucho más que el lugar de un producto en el mercado. Es la ubicación de un bien o servicio en la mente del consumidor.
 
AJUSTES INDUCIDOS
La meta clara de los regímenes involucrados en dicha transición (CLINTON, BUSH, OBAMA) sería que hubiera menos dinero narco en manos de sus adversarios latinoamericanos. Aquí es donde entra en proceso de revaloración una vieja amiga de los cárteles mexicanos: la amapola.
Añádanse a ello, los cambios suscitados en la reglamentación norteamericana que en los últimos tiempos ha convertido en medicamentos controlados, un número amplio de analgésicos, antes disponibles sin receta. Un incentivo más para el mercado negro y en favor de los opiáceos ilegales.
De aquí el éxito de la zona triangular en Cocula, Iguala y Chilpancingo, unida desde el gobierno salinista por la Autopista del Sol, México-Acapulco.
Efecto secundario, desplazar a la coca tuvo impacto geopolítico. Por ello desde los noventas empiezan a ser castigadas las rutas del Golfo.
Aquellas que traían el producto en vuelos rasantes y lanchas rápidas hasta la frontera con Guatemala para de ahí subirla por Campeche, Tabasco, Veracruz y Tamaulipas.
Empezaron con sus operadores; al arrancar el nuevo siglo se extenderían contra sus protectores políticos.
Ojo al detalle: ¿puerto de salida en el antiguo orden?... Matamoros.
Y, bueno, modificar los patrones de consumo cambió los itinerarios, descobijó a unos, fortaleció a otros. Solo que la nueva jauja de la heroína ya no se contentaría con el largo y difícil trasiego de Sinaloa, Sonora, Arizona y California.
Una poderosa alternativa serían las ciudades gemelas del noreste mexicano. Solo había que cruzar la cintura del país, cambiar de litoral y cortar camino por Tamaulipas, con rumbo a Chicago.
Ojo al detalle: ¿puerto de salida en el nuevo orden?... Reynosa.
Este es el trasfondo de los dos terremotos que sacudieron a las empresas delictivas en 2009 y 2010. El pleito por los espacios, la violenta fractura entre el CHAPO y los BELTRÁN LEYVA (2009). Y su consecuencia natural (para los tamaulipecos más cercana), la ruptura entre letras y golfos en el litoral opuesto (2010).
El resultado: la gente del Pacífico buscó controlar la ruta contraria. El emporio colosal de las drogas se reconfiguró, arrastrando en ello a la vida política de las regiones involucradas en toda la travesía de Guerrero a Tamaulipas.
Danza de sombras. Un auténtico vendaval cuyas modificaciones sustantivas tendrían consecuencias electorales y crímenes que llegaron, incluso, al magnicidio.
 
RUTA OBSTRUÍDA
El asunto reventó aquel 26 de septiembre de 2014, cuando los normalistas de Ayotzinapa se apoderaron de varios autobuses para realizar su tradicional peregrinación litúrgica a la plaza de Tlatelolco, en vísperas del 2 de octubre.
Ni siquiera tiene caso el discutir si los estudiantes sabían (o no) que dichos autobuses suelen transportar heroína en compartimentos ocultos para la ruta Iguala-Reynosa. La respuesta que sea no modifica los hechos.
Lo asombroso ocurrió después. Bajo distintas banderas partidistas, las autoridades de los tres niveles reaccionaron de inmediato, como una maquinaria bien aceitada. Urgencia común, ¿tenían muy claro qué hacer o todos recibieron la misma orden?
El caso es que bloquean, atajan y disparan. Los bajan y trasladan al patio de presidencia y, de ahí, en vehículos de carga, los transportan como ganado a la municipalidad vecina de Cocula.
En unas horas, todo estaba consumado. Muertos, quemados y sus restos echados al río, así lo dice la narrativa oficial pomposamente llamada “verdad histórica” y cuya importancia es menor a lo que suponen los medios.
Es verdad (por supuesto) pero muy elemental, nada explica. Solamente describe lo que ocurrió en pocas horas, entre la noche del 26 y la mañana del 27. Para ser realmente histórica (y merecer ese nombre) necesitaría aclarar dudas razonables, ojo:
(1) Si el levantón ocurrió temprano en una vialidad céntrica de Iguala, ¿por qué ninguna corporación superior actuó para frenar el atropello perpetrado por rústicos agentes municipales, con muy limitada potestad preventiva?
(2) Es decir, ¿qué razones tuvieron para quedarse con los brazos cruzados los destacamentos respectivos del 27 Batallón de Infantería, la Policía Federal, la Preventiva Estatal, la Ministerial Estatal y hasta un grupo de Marina ahí presentes?
(3) ¿Por qué nadie intervino, pese al trato salvaje que recibían los muchachos por parte de la policía local cuyo accionar debió detenerse en cuanto las otras corporaciones hicieron presencia?
Preguntas que haríamos extensivas a la autoridad superior en la capital mexicana. El gabinete de seguridad (OSORIO, MURILLO, CIENFUEGOS, SOBERÓN) lo supo de inmediato.
Ello, gracias a las cámaras del C5, monitoreadas desde la muy cercana ciudad de Chilpancingo, capital estatal. Los dejaron hacer, absolutamente.
Haciendo gala de buena memoria, la periodista ANABEL HERNÁNDEZ nos ha recordado que el actual secretario de Seguridad capitalina OMAR GARCÍA HARFUCH era comandante y principal responsable de la Policía Federal durante la tragedia de Iguala. Ni modo que CLAUDIA SHEINBAUM no lo sepa.
 
GOBIERNO IMPÁVIDO
Todo esto torna culposa la inacción gubernamental. Sobre dicha complicidad, la investigación desde el primer día tendría que haberse concentrado en los mandos castrenses y policiacos, estatales y federales.
Sin olvidar la responsabilidad que corresponda al gabinete de seguridad arriba mencionado. En las narices de unos y otros se cometió el secuestro de los muchachos y nadie hizo algo sustantivo para impedirlo.
Lo que vino después fue una nauseabunda cortina de humo, con despilfarro de dinero en peritos innecesarios (argentinos, europeos, norteamericanos) y cuadrillas escarbando entre la basura, en lugar de confrontar a los jefes de las distintas instituciones de seguridad destacamentadas en Iguala.
Se hizo un escándalo en la dirección equivocada. Todavía hoy, bajo el gobierno obradorista, voceros oficiales, comentaristas y hasta caricaturistas se siguen ocupando de denostar la verdad histórica.
Escandalizan demasiado en ello, como si definir el punto exacto donde los cadáveres fueron enterrados resolviera el enigma. Cuando las pesquisas se dirigen de manera franca por la ruta equivocada, el resultado final se llama encubrimiento.
Ojo al dato. Mire usted, aquel PRD, el partido que en 2011 abanderó y ganó la gubernatura para ANGEL AGUIRRE y la alcaldía para JOSÉ LUIS ABARCA, era todavía el de ANDRÉS MANUEL y sus amigos.
Por eso hay fotos de AGUIRRE celebrando su triunfo con los CHUCHOS, EBRARD, AMLO y toda la plana mayor de la izquierda. Hasta una exdirigente como ROSARIO ROBLES (desde 2012 en SEDESOL) aparece en fotos con ABARCA.
De poseer una modesta tienda de sombreros y huaraches en el mercado local de Iguala, ABARCA se había convertido, por la vía del matrimonio, en exitoso empresario de bienes raíces, propietario de una constructora, un colegio privado y establecimientos comerciales.
Durante su trienio, en ceremonia oficial, la SEDENA (el 27 Batallón de Infantería, a cargo del coronel JOSÉ PÉREZ RODRÍGUEZ) había donado un cuantioso predio dentro del casco urbano para que inversionistas privados construyeran el centro comercial "Galerías Tamarindos".
Complejo de 4 hectáreas, con una tienda de autoservicio, 7 salas de cine, 50 locales y estacionamiento para 720 autos. El lector lo puede localizar en la aplicación Google Maps, con ayuda de Street View.
Detalle curioso, el propio JOSÉ LUIS ABARCA y su esposa MARÍA DE LOS ÁNGELES PINEDA VILLA figuraban entre los principales socios de dicho “mall”, donde abrieron varias joyerías. La SEDENA donó el predio, ¿Tanto poder tenían?
 
NEXOS OSCUROS
No había duda de quién era ABARCA cuando empezó su carrera política. Sus cuñados, los hermanos PINEDA VILLA habían operado desde los años noventa como sicarios del cártel BELTRÁN LEYVA.
Después se independizarían creando una organización propia denominada “Guerreros Unidos”. Uno de ellos (SALVADOR, el “Salo” o el “Molón”) fue huésped del CEFERESO en Matamoros, Tamaulipas.
Los demás serían luego asesinados por bandas rivales, ALBERTO y MARIO en septiembre de 2009. El menos conocido, JULIO GUADALUPE, poco después.
Y mire usted, también andaban en esta danza los suegros de ABARCA, de nombres SALOMÓN PINEDA BERMÚDEZ y LEONOR VILLA ORTUÑO, arrestados en Cuernavaca en mayo de 2009 por los mismos motivos, delincuencia organizada, delitos contra la salud. Toda una familia dedicada a los negocios ilegales.
Siendo público todo esto, ¿cómo fue, pues, que aquel PRD original (donde todavía militaban quienes hoy están en MORENA) hizo candidato a la alcaldía de Iguala a un hombre como ABARCA?
La matanza de Ayotzinapa ocurrió en septiembre de 2014. De manera reiterada, en los meses previos (mayo, junio), AMLO había destapado como su “gallo” para la gubernatura al médico LÁZARO MAZÓN ALONSO, por entonces secretario de Salud en el gobierno de ANGEL AGUIRRE.
Todo se cae en los días posteriores a la masacre, pues resultó que LÁZARO MAZÓN es oriundo de Iguala, donde fue presidente municipal y además apadrinó las aspiraciones del propio JOSÉ LUIS ABARCA.
Desatado el escándalo, el primero que renunció a la administración estatal fue el propio LÁZARO. Semanas después caería el gobernador AGUIRRE, mientras se giraban órdenes de aprensión contra ABARCA y su esposa, atrapados luego en la capital del país.
Sin embargo, las autoridades cómplices, los verdaderos gargantones del caso, siguieron (y siguen) impunes. De ello han pasado seis años. Lo único seguro es que los estudiantes están muertos.
El propio ANDRÉS MANUEL acaba de declarar que las investigaciones no avanzan porque los jueces liberan a los detenidos, empleando en ello su pretexto favorito, descargar la culpa en terceros.
Cosecha miserable, el único pez medianamente gordo perseguido por este gobierno resulta ser TOMÁS ZERÓN DE LUCIO, exdirector de la Agencia de Investigación Criminal (2013) y extitular del Consejo de Seguridad Nacional (2016). Prófugo, por cierto.
En suma, la implacable opulencia del triángulo de oro determinó (y sigue determinando) el curso de la vida política y electoral en dicha entidad costeña. Y también en las regiones asociadas, cercanas y distantes, centrales y fronterizas.
Por supuesto, imponiendo su ley por encima de ideologías y estructurando la realidad sin distingo de partidos. El dinero es el dinero y cuando opera en cantidades fabulosas produce milagros.
Verdaderos prodigios como (por ejemplo) el que todas las corporaciones castrenses y civiles, municipales, estatales y federales actuaran a una sola voz, de manera simultánea, sincronizada, mecánica, disciplinada, para aplastar a un grupo de jóvenes que, por razones distintas, entorpecían el negocio. Aritmética elemental.

domingo, 20 de septiembre de 2020

¿Presidente sin partido?

Cd. Victoria.- El INE reporta cien candidatos registrados para contender por la dirigencia nacional de MORENA, 47 buscan la presidencia y 53 la secretaría general.

Batalla campal, en efecto, como en la lucha libre, entre rudos que se disfrazan de técnicos, técnicos que golpean como rudos y un abanico amplio de exóticos.

La disputa ha sido larga, problemática, accidentada y, sobre todo, innecesaria. No obstante ser el partido gobernante, su estructura territorial se encuentra todavía en pañales, en obras, en proyecto.

De 32 jefes de gobierno estatales, tiene 7 solamente. Lo cual significa que 25 entidades se encuentran gobernadas por instituciones partidistas distintas a la del Presidente.

Con registro de partido desde el primero de agosto de 2014, seis años después MORENA carece de un método regular, definido y consensado para disputarse internamente el poder.

Es decir, las dirigencias locales, estatales y la nacional. Tampoco las candidaturas a cargos de elección popular. Su consuelo es que los otros partidos están igual o peor.

En PAN, PRI, PRD y derivados priva el dedazo y los acuerdos cupulares.

Aún así, el referido proceso partidista llega tarde y ofrece un espectáculo lamentable ante el observador ciudadano, no exento de humor involuntario.

Transcurre cuando ya se encuentra en marcha el proceso eleccionario federal del próximo año. Los comicios legislativos intermedios donde serán votados 500 legisladores federales y (en paralelo)15 gobernadores, entre otros cargos.

 

HUELLAS DEL ABANDONO

Cualquiera que observe el calendario interno de MORENA sabrá que el relevo natural de YEIDCKOL POLEVNSKY tendría que haberse resuelto en tiempo y forma, el 20 de noviembre de 2018, una vez transcurrido su periodo de tres años (había sido electa en 2015).
Era una etapa gloriosa para miembros y simpatizantes de dicho partido, AMLO había ganado el primero de julio y se preparaba para asumir en diciembre.

El país tenía puesta la vista en los relevos de las Cámaras y Palacio Nacional. Los reflectores dejaron de apuntar hacia MORENA.

Se desaprovechó la oportunidad, se incurrió en eso que llaman PROCASTINACIÓN, al postergar, aplazar una decisión tan importante, concediéndole a YEIDCKOL el capricho de permanecer un año extra en el cargo. Año improductivo y perdido.

Una vez cumplido el nuevo plazo, 12 meses después, en noviembre de 2019, la señora POLEVNSKY volvería a la cargada con una desfachatez sorprendente y (ojo) el silencio cómplice del presidente.
Con la mano en la cintura boicotea las reuniones preparatorias de la elección interna, se ausenta cuando le conviene, suelta buscapiés entre sus amigos de la prensa, deja circular la especie de que pudiera quedarse otro año más, emprende exitosas maniobras dilatorias.

Fue necesaria una verdadera operación quirúrgica para extirparla del cargo. Pero esto ocurrió hasta el 26 de enero de 2020. Haciendo cuentas: ¡14 meses después de haber concluido el periodo para el cuál fue votada en 2015!...

¿Dónde estaba AMLO mientras tanto?... Ajeno, distraído, desatento hacia las cuestiones relativas al partido que fundó y dirigió. Al menos esta es la explicación dominante.

Aunque la suspicacia ciudadana apunta hacia una complicidad silenciosa con las maniobras oscuras de YEIDCKOL, a quien el propio ANDRÉS MANUEL impulsó para ocupar el cargo.

El partido quedaría en manos de un dirigente interino, de mediano perfil pero larga trayectoria de izquierda (PMS, PRD, MORENA) como es el barzonista zacatecano ALFONSO RAMÍREZ CUELLAR.

Hombre pachorrudo cuya gestión no parece incluir tareas de proselitismo, ni de expansión o reorganización territorial. Llegó tan solo a gestionar el vacío y encaminar su reemplazo.

 

CUENTA REGRESIVA

Mientras tanto sigue perdiendo hojas el almanaque. Los procesos eleccionarios del 2021 ya están en cuenta regresiva y el partido oficial continúa sin comportarse como tal.

La lejanía de ANDRÉS MANUEL hacia el instituto que lo llevó al poder parecería más emparentada con el caprichoso desdén que con la sana distancia.

Su fórmula de presidente fuerte con partido débil deriva de una concepción monolítica y unipersonal del poder. Una sola voz, la suya; con las demás instancias siempre a la zaga, incluyendo el partido.

Para quienes se interesan en las asignaturas pendientes de la vida política mexicana, el mejor ejemplo es MORENA. A dos años de su triunfo no se pueden poner de acuerdo ni siquiera en el método de elección, abundan reclamos de “piso parejo” que en buena medida alertan contra favoritismos.

Pero todos los partidos andan así, unos más, otros menos. El PRI pasó del ejercicio pleno del poder (1929-2000) a ser oposición 12 años (2000-2012) y luego otra vez gobierno (2012-2018) sin abandonar (jamás) el sagrado “dedazo”, como método autoritario para imponer dirigencias y candidaturas a todos los niveles.

El PAN tuvo dos elecciones ejemplares de abanderados presidenciales (2005 y 2012) y luego retrocedió a la autoimposición perpetrada por RICARDO ANAYA en 2017, tan descarada y aparatosa como la que consumó ROBERTO MADRAZO en 2005.

De los demás partidos hay poco que agregar. Son franquicias familiares (PVEM, PT, MC) o grupos cerrados que funcionan prácticamente como consejos de administración (PRD, PES, PANAL, RSP).

 

A LA DERIVA…

Hoy dice AMLO que el mejor método para una elección interna es la encuesta. Herramienta por demás impersonal (y fácilmente adulterable) que en el fondo revela la pervivencia de una muchedumbre invertebrada y sin estructura.

Multitudes sin forma, ni límites definidos. Masa ciega, muy al gusto de su líder, rasgo típico de un movimiento al que no le permiten fraguar como partido.

De haber elecciones internas ¿Quiénes tendrían derecho a votar?, ¿sus dirigencias están en condiciones de diferenciar al militante del simpatizante?...

Detalle significativo, al presidente no parece preocuparle ni le corre prisa por resolver el asunto. Incluso ya amenazó con salirse de MORENA, si no lo obedecen.
Se saldría y (además) pediría que le cambiaran el nombre para que “no se manche” la marca que llevó al poder su proyecto de la Cuarta Transformación.

¿Será por eso que YEIDCKOL quiso registrar ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) los nombres y frases de batalla de MORENA?

¿Fue por órdenes de LÓPEZ OBRADOR que buscaron privatizar el uso de eslogans y marcas como “Morena, La Esperanza de México”, “La Cuarta Transformación”, “Morena TV”, “Morena Radio”, “Morena AC”, “Morena Digital”, “Regeneración” y “Juntos Haremos Historia”?

El caso es que al presidente no parece interesarle el dejar como legado o heredar a las próximas generaciones un partido fuerte que defienda su ideario en los años y décadas por venir.

¿El partido ha dejado de serle útil?, ¿o le son políticamente más rentables los instrumentos del estado que compran votos mediante el reparto calculado de recursos?, ¿qué piensa ANDRÉS MANUEL?, ¿después de mí el diluvio?...


domingo, 13 de septiembre de 2020

Xico, ¿segundo debut?

Cd. Victoria.- Para fines de imagen, es ya una ventaja el que haya dejado de bailar (en público) y circulen menos videos donde besuquea a sus colaboradores y amigos.
Añádase a ello el innegable impacto que una magna obra como la renovación de tuberías y válvulas de COMAPA tendrá sobre quienes gobiernan Victoria.
¿Causa, motivo, razón?...
Teóricamente, el jefe de la comuna cueruda preside la junta de administración en dicho organismo de agua y drenaje. En el papel, al menos.
Aunque es público y notorio que la tarea jamás habría avanzado un milímetro sin la luz verde del gobierno tamaulipeco, que prácticamente hizo suyo el proyecto y aportó los recursos necesarios.
Lo cual no impide que el alcalde se luzca (ahora sí que con guaripa ajena) por una obra que no es suya y donde solo cumple el papel de firmón. De florero, pues.
Y lo hace porque carga varios proyectos políticos en sus alforjas. 
El más urgente sería (1) que el PAN lo haga candidato nuevamente a la alcaldía, pero también (2) ganar la reelección, por el PAN o (en su defecto) por el membrete más a modo que lo quiera abanderar y (3) meterse a la puja tras la candidatura a gobernador (igual, por los colores que fuera y hasta independiente).
De esto último comenta (otro bailador) el tesorero PEÑA RODRÍGUEZ, cuando susurra a quien quiera oírle que XICO tiene tamaños para heredar la silla que hoy ocupa FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA.
Sí señor. Lo cual no sabemos qué tan agradable pueda ser para el senador ISMAEL (por citar un caso).
O para su colega AMÉRICO, también senador y prospecto de MORENA.
O personajes en la misma tesitura, como RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, titular de RTC, entre otros.
No debemos olvidar que XICO salió inicialmente de su consultorio para convertirse en candidato independiente en 2016.
Se recordará que obtuvo malos resultados y ello lo movió a buscar el cobijo del PAN para la sucesión municipal del 2018.
Lo cual significa, entre otras cosas, que carece de linaje, de sangre azul.
Se volvió panista por mera conveniencia, aunque la ciudad todavía lo recuerde prestando servicios en las cabalgatas de los gobernadores priístas.
No hay pues querencia antigua hacia el Partido Acción Nacional. 
Ni militancia, ni afinidad de ideales, ni convergencia doctrinal.
Solo un inmenso afán por el poder, sus mieles, privilegios y reflectores.
Por ello en el comité albiazul que hoy comanda LUIS RENÉ, “Cachorro”, CANTÚ, se han encendido los focos rojos.
Preocupa la doble posibilidad de que (1) XICO se cuele de nuevo por el PAN y pierda…
O bien (2) compita por otro partido y divida al voto panista, en beneficio de alguien más.
Es la razón por la que hoy se apuntan figuras más frescas del PAN, estas sí, con militancia probada, compromiso partidista, méritos.
Como la diputada local PILAR GÓMEZ LEAL o su colega legislativo ARTURO SOTO ALEMÁN.
Sin olvidar al prianista MIGUEL MANZUR, aspirante que ya se apunta desde ahora. 
En este contexto político se lleva a cabo la renovación de tuberías emprendida por COMAPA.
La cuál, hay que decirlo, responde efectivamente a un diagnóstico real.
Es cierto que la escasez de agua en Victoria (como en cualquier ciudad del mundo) tiene entre sus agravantes la obsolescencia de sus tuberías.
Erosión, desgaste, fracturas y las comprensibles fugas.
El diagnóstico viene de varias administraciones atrás.
La corrección del problema sin duda mejorará el servicio. 
Digamos que frenar el desperdicio de agua potable fue una buena decisión del gobernador CABEZA DE VACA.
No resuelve del todo el desabasto porque para ello sería necesario construir un segundo ducto desde la presa VICENTE GUERRERO.
Aquel que con gran sentido de la anticipación previó el ingeniero AMÉRICO VILLARREAL GUERRA.
Sin embargo en mucho alivia y (justo es decirlo) ya se empieza a sentir la diferencia en términos positivos. 
El incremento a la presión en las llaves es palpable.
No todavía en la cantidad que los consumidores merecen y esperan, aunque sí en proporción suficiente para representar un respiro. 
Por lo menos en el centro y en las zonas residenciales.
Sigue faltando en muchas colonias populares.
Por todo ello, en ocasión de su segundo informe municipal, el alcalde XICO se dio rienda suelta posando para las cámaras al tiempo que brincotea entre zanjas y nuevos ductos de COMAPA, como si fuera obra suya.
Se cuelga un mérito y un aplauso que en realidad corresponden al gobierno estatal.
Como el mosquito trepado a la yunta que dice “vamos arando.”
Y lo hizo también en unos videos promocionales de su segundo informe que merecen comentario aparte.
Bien plantados los videos en su concepción, les pesa sin embargo que el alcalde aparezca a cuadro como una presencia demasiado densa.
Es un hombre muy oscuro, pesado, de difícil digestión.
Meritoria tarea de marketing, aunque el producto no esté a la altura.
El esfuerzo es bueno, pero no hay mucho que vender.
La gente que lo observa no logra descifrar ese gesto tan raro.
Su mueca favorita, mezcla inusual de risa y llanto. 
Como el “Garrick” de JUAN DE DIOS PEZA, parece que ríe llorando y llora a carcajadas.
El resultado de los promocionales es bastante pobre, aunque el esfuerzo de comunicación sea digno de reconocimiento.
Los frescos chorros de COMAPA le ayudan a XICO, en efecto, a levantar el rating, aunque muy poco (o nada) haya tenido que ver en la maniobra.
Podríamos hablar de un segundo aire o segundo debut, como aquella crema para las arrugas.
A ver cuánto le dura.

martes, 1 de septiembre de 2020

Mañanera con esteroides

Cd. Victoria.- Se necesita estómago para cubrir periodísticamente las alocuciones de AMLO (todas) incluyendo informes trimestrales y anuales, las cinco mañaneras (lunes a viernes) mas los mensajes especiales de sábado y domingo.

Maratones de palabras. Experiencia abrumadora que incluye tragar sapos, verdades a medias, mentiras flagrantes, interpretaciones sesgadas, estadística mendaz, arrebatos de poesía patria, reprimendas bíblicas.

Y una exposición recurrente de rencores añejos, agravios reales o ficticios, en cuyo nombre se maquillan diagnósticos, enderezan apodos y formulan cargos del más diverso corte.

AMLO es así, lo suyo es el verbo. Monologar a perpetuidad, de manera incontinente, mientras el sexenio lo permita, pues sabe lo mucho que su efectividad depende de ello.

Relación, en efecto, dependiente, adictiva, acaso, hacia el ejercicio de la voz. Eterna necesidad de deslinde hacia todo aquello que, por serle ajeno, le resulta hostil.

Lo dijo alguna vez en Palacio, cuando empezaba la pandemia. Sus adversarios (se quejó) quieren que cancele las conferencias matutinas, pero (añadió) ello sería darles ventaja.

Ups, ups y recontraups, a ver, paren cámaras, congelen imagen, permítanme preguntar…

-¿O sea que si no habla está en desventaja?...

Mire usted, habrá quien piense (la mayoría, creo) que la prueba más contundente del buen trabajo institucional radica y se expresa en el lenguaje de los hechos. La materialización de logros y avances concretos.

A la inversa, en Palacio Nacional dicha función recae en el sacerdocio de la palabra. Baste decirlo para que exista, invocar es dar vida, soplo mágico.

El discurso, la alocución, la voz perenne del chamán que separa una y otra vez lo existente de lo inexistente. Dónde radica lo cierto y lo verdadero.

-“Ya no hay masacres”, dice cuando aborda el asunto de la inseguridad, aunque la familia LE BARÓN acaso opine lo contrario.

-“Se respetan los derechos humanos”, mientras en Nuevo Laredo avanza un caso en torno a un delincuente y sus víctimas ejecutados por el ejército.

El Presidente se empeña en contarle a la gente más sencilla todo aquello que haga falta para reforzar la decisión expresada hace dos años en las urnas, los 30 millones. ¿El pueblo tiene memoria débil?

No necesariamente. Más bien, el guión dirigido al tímpano busca oscurecer los datos que vienen de la mirada. Si el mundo de lo visible ofrece un diagnóstico infame, que el oído apuntale la melodía purificadora.

La pandemia bajó, la economía se recupera, hay menos delitos que en sexenios anteriores. Sanación auditiva, en efecto, que apela a los estratos más arcaicos del entendimiento.

No busca arraigo en la mente, se conecta al corazón. Consciente está de que el oído es anterior a la palabra y escuchamos antes de saber hablar. Antes incluso de que los ojos enfoquen y distingan contornos.

Y, por supuesto, escuchamos antes de leer. De aquí la importancia que AMLO otorga al oficio de predicador, de proselitista en jefe. Su desprecio a lo textual.

El periodismo podrá exponer un caudal macizo de argumentos y demostrar el mal trabajo de gobierno, pero su voz se sobrepondrá a lo escrito para declamar lo contrario. Verdad primera y última, de nadie más, expresada en tono de jaculatoria, como le gusta a la gente.

De aquí la respuesta tan genuina, palpable, innegable, que encuentra el jefe supremo entre los sectores más audiosensibles. Los menos reflexivos.

Esos que (no por casualidad) son mayoría en este país. El llamado “pueblo bueno y sabio” cuya razón se eclipsa cuando asoma ese rostro cada mañana, señalando derroteros tajantes al consentimiento.

Su apuesta es (precisamente) que no piensen. Que confíen, porque la palabra confiar viene de orientar el comportamiento colectivo a partir de la fe.

La política en los tiempos de LÓPEZ OBRADOR no se hace debatiendo ideas sino acatando dogmas. Verdades inobjetables que el sumo pontífice dispensa a diario, haciendo suyo el principio de infalibilidad que antes conocimos entre los papas romanos.

En esto debes creer, a tales y cuáles debes odiar, la bondad florece aquí, la maldad pernocta allá.

¿Segundo informe?... Mire usted, razón asiste a quien duda hoy de la palabra “segundo”. Incluso podríamos decir que su antecedente no es el denominado “primer informe” (septiembre de 2019) sino todos los reportes trimestrales.

Aunque antes de los trimestrales existieron las mañaneras. Sin ánimo de ofender, para fines prácticos el mensaje es el mismo.

Cifras más, cifras menos, la homilía de este martes no fue más que una mañanera con esteroides. Aunque más cómoda todavía, porque no incluyó preguntas de los asistentes.

Mucho lirismo y poca administración. Pobreza de datos y acaso por ello jamás podríamos ubicar a dicha lectura en la categoría regular de un documento. Ni siquiera recuento de labores, muy apenas parloteo informal.

En las democracias europeas, ceremonias de este corte suelen abrir dinámicas para que los parlamentarios planteen dudas y posicionamientos al expositor central.

Acá solo aplauden y cantan el himno. ¿Quién dijo que el viejo monólogo tricolor está muerto y enterrado?
Cambió para no cambiar, es todo.